EE.UU. revoca visados a estudiantes por expresar opiniones sobre conflicto israelí-palestino
Más de 4.000 extranjeros han perdido sus permisos, según el Gobierno. La medida afecta principalmente a universitarios vinculados a protestas, aunque algunos casos, como el de una turca en Tufts, generan controversia por falta de cargos concretos.
«Deportaciones por palabras, no por actos»
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) justifica las acciones bajo una enmienda de 2005 que permite expulsar a quienes generen «consecuencias adversas para la política exterior». Rumeysa Ozturk, estudiante turca, fue detenida por agentes de ICE tras coescribir un artículo crítico con la postura de su universidad. No se le imputan delitos ni disturbios.
Repercusión para inmigrantes
Analistas advierten que el precedente obliga a «autocensura» en debates políticos. El texto cita a Barbara Jordan: «La inmigración es un privilegio, no un derecho constitucional».
Europa también ajusta sus criterios
Alemania exige desde 2024 que los solicitantes de ciudadanía reconozcan el derecho a existir de Israel. Países Bajos evalúa valores como igualdad LGBT+ en sus tests de naturalización. Según una encuesta de Gallup, el 20% de los migrantes potenciales elegiría EE.UU. como destino.
Antecedentes históricos
La ley de inmigración estadounidense ha excluido históricamente grupos por ideología (anarquistas en 1903, comunistas en 1952). El artículo señala que, aunque hoy se rechazan criterios raciales, los valores siguen siendo un filtro válido para evitar «terrorismo o antisemitismo».
Un debate que cruza fronteras
La tensión entre libertad de expresión y control migratorio divide a Occidente. Mientras algunos ven en las protestas pro palestinas «incompatibilidad con valores liberales», otros alertan sobre restricciones desproporcionadas. El texto concluye citando al filósofo Karl Popper: «La tolerancia ilimitada destruye a los tolerantes».