Anja Siegesmund defiende el papel político de la Iglesia

La presidenta del Kirchentag 2025 responde a críticas sobre el activismo de la Iglesia en temas como migración y clima, defendiendo su relevancia social.
ZEIT ONLINE
Dos personas sosteniendo una esfera grande con grafitis frente a un edificio histórico.
La imagen muestra a dos personas levantando una gran esfera cubierta de grafitis, situadas frente a un edificio antiguo con banderas.

Anja Siegesmund defiende el papel político de la Iglesia en el Kirchentag

La presidenta del evento religioso rechaza las críticas de la CDU sobre su activismo. El debate surge en el marco del Kirchentag 2025 en Hannover, donde se abordarán temas como migración y clima. Siegesmund insiste en que la Iglesia debe ser «relevante» ante los desafíos actuales.

«El Evangelio es profundamente político»

Anja Siegesmund, presidenta del Evangelischen Kirchentag, responde a las acusaciones de Julia Klöckner (CDU), quien considera que la Iglesia se ha alejado de su esencia al actuar como una ONG. «La Iglesia no puede callar ante crisis como la climática o las muertes en el Mediterráneo», afirma Siegesmund. Defiende acciones como el apoyo a la ONG United for Rescue y la crítica a empresas como Coca-Cola o X (antes Twitter).

Relevancia histórica y social

Recuerda que el Kirchentag nació en 1949 como respuesta al silencio de la Iglesia durante el nazismo, y destaca su rol en movimientos como las protestas contra armas nucleares en los años 80. «Hoy seguimos siendo un espacio para construir esperanza», subraya.

Derechos humanos vs. polarización

Ante la acusación de excluir a ciertos grupos, Siegesmund es clara: «Los derechos humanos no son negociables». Rechaza que la Iglesia esté «muy a la izquierda» y enfatiza que su postura sobre migración o clima emana de «valores cristianos y diaconía». También aborda las críticas por su adaptación durante la pandemia: «El reto ahora es combatir la soledad y recuperar la confianza».

Una herencia de compromiso

El Kirchentag tiene una tradición de activismo político vinculado a la fe, desde la Guerra Fría hasta la actualidad. Siegesmund lo define como un espacio para «dialogar, empoderar y actuar», especialmente en un contexto de discursos polarizados y crisis globales.

Una Iglesia que no mira hacia otro lado

El debate refleja la tensión entre una visión tradicional de la Iglesia y otra que busca incidir en problemas sociales urgentes. El Kirchentag 2025 será una prueba de su capacidad para mantener este equilibrio sin perder relevancia.