ONG crea corredor de un millón de hectáreas para conectar reservas en el Congo
La ONG Strong Roots Congo ha asegurado cerca de 600.000 hectáreas mediante concesiones forestales comunitarias. El objetivo es crear un corredor de biodiversidad de un millón de hectáreas entre el Parque Nacional Kahuzi-Biega y la Reserva Natural de Itombwe en la República Democrática del Congo (RDC).
Un proyecto para corregir un error histórico
El corredor busca rectificar los desalojos históricos causados por la creación del Parque Nacional Kahuzi-Biega. Dominique Bikaba, director de Strong Roots Congo, explica que el proyecto pretende conservar el bosque y promover los medios de vida de las comunidades locales. Hasta la fecha, se han formalizado 23 concesiones forestales comunitarias (CFCL).
Mecanismo legal para la protección
El proceso implica que las comunidades registren sus tierras consuetudinarias como CFCL bajo un plan de gestión ambiental. Anastasie Bahati, oficial de programa de Strong Roots, detalla el trabajo de campo para el mapeo participativo y la presentación de solicitudes al gobierno. Las concesiones otorgan la tierra a las comunidades de forma perpetua.
El conflicto armado frena el avance
El resurgimiento del grupo armado M23 en el este de la RDC está ralentizando el proyecto. Bahati señala que el acceso al área de operaciones es difícil debido a los puestos de control. A pesar de esto, la organización insiste en que asegurar la tierra es clave para evitar la destrucción del bosque por personas que huyen de los combates.
Antecedentes: Un legado de desplazamiento
La creación del Parque Nacional Kahuzi-Biega desplazó a muchas familias, incluidas las del pueblo indígena Batwa. Un libro de Albert Barume, relator especial de la ONU, estima que un 50% de la población Batwa murió en las dos décadas posteriores a la expulsión violenta. Este hecho histórico motiva el enfoque comunitario del corredor.
Cierre: Implicaciones para la conservación
El proyecto representa un cambio en el modelo de conservación, integrando a las comunidades como protectoras del territorio. Arthur Kalonji, director en funciones del Parque Kahuzi-Biega, apoya la iniciativa, ya que las CFCL pueden actuar como una zona de amortiguación para el parque y reducir los conflictos entre humanos y animales.