Inundaciones en El Torno dejan tres fallecidos y diez comunidades afectadas
Tres personas fallecidas y ocho desaparecidas es el saldo preliminar de las inundaciones en El Torno. El vicepresidente Edmand Lara evaluó los daños y solicitó apoyo aéreo urgente. Las lluvias extraordinarias causaron el desborde histórico de la quebrada Espejos y el río Piraí.
Evaluación de daños y rescates en terreno
El vicepresidente Lara confirmó que diez comunidades resultaron afectadas. Reportó casos agravados por el ingreso del agua y lodo, con pérdida de animales y enseres. Las labores de auxilio enfrentan dificultades por problemas técnicos en el helicóptero Super Puma. La Policía realiza evacuaciones mientras se busca a personas atrapadas, como un hombre en el techo de su vivienda.
Urgencia de apoyo logístico y críticas
Lara pidió mayor apoyo de las Fuerzas Armadas y la intervención de la ABC para refaccionar caminos dañados. Criticó que «no se han hecho en su momento los defensivos» en el río Piraí. Alertó sobre la evacuación de un herido por picadura de víbora y remarcó la necesidad de apoyo aéreo para zonas inaccesibles.
Comunarios y autoridades en rescate improvisado
En la comunidad de Espejos, el vicepresidente y pobladores rescataron una vaca atrapada en la palizada. El animal fue sacado al hombro con una camilla improvisada con palos. Lara describió que la palizada «está tremenda» y que el camino es inestable.
Origen de un desastre natural histórico
El director del SEARPI, José Antonio Rivero, calificó el hecho como un desastre natural de magnitud histórica. Una crecida sin precedentes de la quebrada Espejos y el río Piraí, por lluvias en la serranía del Amboró, provocó el colapso de tres puentes. En Espejos se registraron más de 200 milímetros de lluvia y el río alcanzó 12 metros de altura, un récord. El impacto se extendió a los ríos Surutú y Yapacaní.
Réplica en la capital y alerta departamental
El impacto de las riadas activó la alerta roja en el departamento de Santa Cruz. En la capital cruceña, el río Piraí alcanzó los 4,5 metros, otro registro histórico que encendió las alarmas de las autoridades. La palizada arrastrada por el caudal terminó llegando a las viviendas aledañas a los cursos de agua.