Evo Morales ofrece apoyo a Andrónico Rodríguez como candidato presidencial
El líder cocalero cambia de discurso tras meses de tensiones. Morales asegura que le propuso ser candidato, pero Rodríguez guardó silencio. El conflicto surge en medio de la pugna por la candidatura oficialista para las elecciones de 2025.
«Si quieres ser candidato, te apoyo»
Evo Morales reveló en su programa radial que hace tres meses ofreció respaldo a Andrónico Rodríguez para postularse a la presidencia, pero el presidente del Senado «quedó callado». El anuncio contrasta con las resoluciones previas de las 6 Federaciones del Chapare que prohibían su candidatura. «Yo le dije: ‘di, quiero ser candidato'», afirmó Morales.
De jefe de campaña a rival político
En febrero, diputados evistas anunciaron que Rodríguez sería jefe de campaña de Morales, pero la idea se descartó. La popularidad del senador creció entre jóvenes, lo que generó roces. El 10 de marzo, una resolución firmada por Morales ratificó que él era el «único candidato» y vetó a Rodríguez, quien desde entonces marcó distancia.
Andrónico se arropa con el respaldo popular
Rodríguez inició una campaña independiente, participando en proclamaciones como la del 6 de abril en Potosí. «Bolivia necesita líderes honestos que piensen en la colectividad», declaró. Ignoró reuniones convocadas por Morales y viajó a España para reunirse con la izquierda local. Sus aliados aseguran que no volverá a eventos del líder cocalero para evitar «humillaciones».
Una fractura anunciada
Morales, con 30 años en la política, ha intentado controlar las acciones de Rodríguez mediante resoluciones de las 6 Federaciones. Sin embargo, el senador ha ganado autonomía, respaldado por organizaciones sociales. La última vez que aparecieron juntos fue en marzo, durante la lectura de la resolución que lo excluía como candidato.
Elecciones en el horizonte
La pugna refleja la división en el oficialismo ante las elecciones generales de agosto. Mientras Morales insiste en su liderazgo, Rodríguez apela a un discurso renovador. El silencio del senador ante la oferta de Morales marca un punto de no retorno en su relación política.