EEUU fracasa en dividir a UE y China en transición energética

La delegación estadounidense criticó las políticas verdes y a China en una cumbre energética, pero fue ignorada por líderes europeos.
POLITICO
Primer plano de una persona con traje y corbata.
Imagen de una persona en primer plano con expresión neutra.

EEUU fracasa en intento de dividir a UE y China en transición energética

La delegación estadounidense criticó las políticas verdes y a China, pero fue ignorada. Ocurrió en una cumbre en Londres con 60 países, donde Europa defendió su apuesta por energías limpias pese a los riesgos geopolíticos.

«Ideología versus realidad»

La administración Trump llegó a la cumbre energética del 25 de abril con un mensaje claro: «Las políticas verdes son peligrosas y benefician a China», según Tommy Joyce, alto funcionario del Departamento de Energía de EEUU. Sin embargo, «sus intervenciones fueron consideradas fuera de lugar», según fuentes europeas presentes.

Reacciones europeas

Líderes como la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, o el primer ministro británico, Keir Starmer, rechazaron el discurso estadounidense. «Las renovables locales fortalecen nuestra resiliencia», afirmó von der Leyen. El secretario de Energía del Reino Unido, Ed Miliband, añadió que «la transición limpia es irreversible».

El dilema de la dependencia

Europa reconoce los riesgos de depender de China en cadenas de suministro (paneles solares, baterías), pero descarta sustituirlos por combustibles fósiles estadounidenses. Fatih Birol, de la Agencia Internacional de Energía, advirtió que «la concentración de fuentes energéticas siempre es arriesgada».

¿Puntos en común?

El Reino Unido propuso colaborar con EEUU en tecnologías como la nuclear o la geotermia. Miliband destacó la importancia de que EEUU «participe en estos diálogos», pese a las diferencias.

Un contexto de tensiones geopolíticas

La cumbre reflejó la pugna entre modelos energéticos: EEUU promueve combustibles fósiles como «garantía de seguridad», mientras Europa acelera su transición verde, aunque consciente de los desafíos logísticos y políticos que implica reducir la dependencia de China.

Credibilidad en juego

Analistas como Jesse Young, exfuncionario climático de EEUU, señalan que la postura estadounidense «daña su influencia global». El resultado de la cumbre sugiere que el mensaje de Trump no logró fracturar el consenso europeo sobre energías limpias.