Bryan Johnson emite en directo su viaje con hongos psilocibios
Más de 1,1 millones de personas vieron la emisión de cinco horas y media. El empresario de la longevidad realizó el experimento en un centro legal de Oregón para estudiar el impacto en sus biomarcadores.
Un experimento con mediciones y polémica
Antes de consumir más de cinco gramos de hongos, Bryan Johnson midió su actividad cerebral con un casco de 50.000 dólares. La retransmisión incluyó a su hijo, al periodista Ashlee Vance y al CEO de Salesforce, Mark Benioff. Varios expertos criticaron el formato, señalando que la exposición pública puede perjudicar la experiencia introspectiva propia de estas sustancias.
Críticas por el enfoque y el posible beneficio comercial
Rayyan Zafar, del Centro de Investigación en Psicodélicos del Imperial College de Londres, indicó que la configuración “habla más del enriquecimiento del ego que de su disolución”. Colette Schmitt, fundadora de Decriminalize Nature Philadelphia, destacó la ausencia de científicos reales en la emisión y advirtió sobre la desinformación en el movimiento psicodélico.
Un contexto de legalidad y debate científico
El consumo se realizó en un centro con licencia en Oregón, estado donde esta práctica es legal desde 2023. Johnson investiga si la psilocibina puede mejorar casi 250 biomarcadores de bienestar, incluyendo medidas de conectividad cerebral y niveles hormonales.
Implicaciones para la percepción de los psicodélicos
Pese a las críticas, algunos observadores apuntan que la retransmisión podría ayudar a reducir el estigma alrededor de estas sustancias. El evento coincide con un momento en que la investigación explora su potencial para condiciones de salud mental, aunque con preocupación por la influencia de figuras sin formación científica en el campo.