India culpa a Pakistán de ataque mortal en Cachemira y suspende tratado de aguas
26 personas murieron en un ataque contra turistas en la región disputada. India acusó a Pakistán de estar detrás del atentado, redujo relaciones diplomáticas y suspendió un tratado clave de 1960. El incidente ocurrió el martes en Pahalgam, una zona turística de Cachemira administrada por India.
«Respuesta contundente con medidas diplomáticas»
El secretario de Exteriores indio, Vikram Misri, anunció la suspensión del Tratado de Aguas del Indo hasta que Pakistán «renuncie irrevocablemente al terrorismo transfronterizo». Ambos países reducirán su personal diplomático de 55 a 30 funcionarios y cerrarán el principal cruce terrestre. Pakistán negó su implicación y calificó la decisión india como un «pretexto».
La cacería de los atacantes
Miles de soldados y policías indios rastrean la zona en busca de los agresores, que actuaron «indiscriminadamente» según testigos. Un grupo desconocido, Cachemira Resistance, reivindicó el ataque en redes sociales, alegando que las víctimas estaban «vinculadas a agencias de seguridad». 24 de los fallecidos eran turistas indios, uno nepalí y otro un guía local.
Turistas huyen y tensiones históricas resurgen
Tras el ataque, cientos de turistas abandonaron Cachemira por miedo. «Es desgarrador ver este éxodo», admitió el líder regional Omar Abdullah. India promovía el turismo como señal de «normalidad» pese a la fuerte presencia militar. Pakistán envió condolencias pero rechazó las acusaciones, mientras su primer ministro analiza una respuesta oficial.
Agua y guerras: un tratado que sobrevivió a todo
El Tratado del Indo, mediado por el Banco Mundial en 1960, reparte las aguas de un sistema fluvial vital para ambos países, especialmente para la agricultura pakistaní. Había resistido dos guerras (1965 y 1971) y un conflicto fronterizo en 1999. Su suspensión marca un punto de inflexión en las relaciones bilaterales.
El fantasma de la violencia no se disipa
El ataque reaviva tensiones en una región donde la militancia contra el dominio indio persiste desde 1989. India revocó la autonomía de Cachemira en 2019, aumentando la represión. Aunque la violencia había disminuido en el valle, los enfrentamientos se trasladaron a zonas remotas como Jammu. La medida india podría escalar la crisis entre dos potencias nucleares.