El DOT de EE.UU. pide reconsiderar renuncias tras alta aceptación
Un 9% de los empleados aceptó dejar el Departamento de Transporte. La agencia intenta retener a algunos ante el impacto operativo. La medida busca recortes presupuestarios, pero excluye a personal crítico para la seguridad.
«Un lío que HR no creó»
Unas 4.700 personas (principalmente de la FAA) aceptaron la segunda oferta de renuncia diferida, según fuentes internas. El DOT corrigió la cifra a «cerca de 4.000», pero admitió que equivaldría al 9% de su plantilla total. «Es un desastre. Los equipos de recursos humanos están desbordados», confesó un empleado anónimo.
Excepciones y seguridad
El portavoz oficial destacó que los trabajadores en áreas de seguridad (como controladores aéreos) están exentos. La FAA, que gestiona el 82% de la plantilla del DOT, aún lidia con las secuelas de un choque aéreo en enero que dejó 67 muertos.
Ofertas en cascada
El 1 de abril, el DOT lanzó su segunda ronda de renuncias voluntarias, con beneficios hasta septiembre. Sumarían a los 2.000 despidos o renuncias desde que Trump asumió. «No anticipamos despidos masivos en la FTA», declaró un directivo en una llamada interna.
Recortes bajo la lupa
La administración Trump y el equipo de Elon Musk impulsan recortes en el sector público. El DOT debía presentar un plan de despidos masivos en marzo, pero aún no lo ha ejecutado. En febrero, 700 empleados despedidos fueron recontratados por orden judicial.
¿Eficiencia o riesgo?
El equilibrio entre ahorro y operatividad sigue en debate. El DOT insiste en que las «redundancias» garantizarán la seguridad, mientras analistas observan el impacto real tras septiembre.