Doce cardenales compiten por suceder al papa Francisco
El Cónclave elegirá entre perfiles reformistas y conservadores. Tras la muerte del pontífice a los 88 años, la Iglesia católica enfrenta una decisión crucial para su futuro. El proceso se desarrolla en el Vaticano con 1.300 millones de fieles pendientes.
Un legado que divide: ¿continuidad o cambio?
La sucesión de Francisco polariza al Colegio Cardenalicio. Matteo Zuppi, cardenal de Bolonia, encabeza la línea progresista: «Ha bendecido a parejas homosexuales y defiende una Iglesia abierta». En contraposición, Robert Sarah (Guinea) simboliza el tradicionalismo, con críticas a las reformas sobre divorcio y LGTBI.
Perfiles clave en la carrera
Luis Tagle (Filipinas) destaca por su carisma y cercanía a los jóvenes, mientras Angelo Bagnasco (Italia) representa el ala ortodoxa: «Posturas inflexibles sobre celibato y matrimonio homosexual». El secretario de Estado Pietro Parolin emerge como candidato de consenso por su experiencia diplomática.
Voces globales, visiones opuestas
Desde Asia, Charles Maung Bo (Birmania) ofrece un estilo dialogante, mientras el húngaro Péter Erdő combina rigor doctrinal con sensibilidad pastoral. Willem Eijk (Países Bajos), experto en bioética, rechaza debates sobre ordenación femenina o relaciones homosexuales.
De Bergoglio a la encrucijada
Francisco dejó una Iglesia marcada por reformas incompletas y tensiones entre apertura y tradición. Su pontificado (2013-2025) impulsó el diálogo interreligioso y la atención a migrantes, pero enfrentó resistencias internas. El nuevo líder heredará estos desafíos en un mundo polarizado.
La fumata que definirá el siglo
El Cónclave no solo elegirá un nombre, sino el rumbo de la institución. Con figuras como Jean-Marc Aveline (Francia), favorito del sector bergogliano, o el conservador Malcolm Ranjith (Sri Lanka), la decisión afectará a políticas pastorales, relaciones globales y la cohesión interna católica.