León XIV permite al Vaticano usar bancos extranjeros para sus fondos
El Papa León XIV ha eliminado la competencia exclusiva del Instituto para las Obras de Religión (IOR) sobre la gestión de los activos financieros de la Santa Sede. La medida, adoptada mediante un documento oficial, permite a la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (APSA) recurrir a entidades financieras fuera del Vaticano.
Fin de una gestión exclusiva
El nuevo documento abroga la decisión de su predecesor, el Papa Francisco, quien había otorgado la gestión exclusiva al IOR tras una serie de escándalos financieros. La Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (APSA), que gobierna el fondo soberano, ya no está obligada a utilizar únicamente el Banco Vaticano.
Nuevas reglas para las inversiones
La normativa establece que las inversiones deben realizarse conforme a la política del Vaticano. Se permite la excepción de usar intermediarios en otros países cuando los órganos competentes lo consideren «más eficaz o más práctico».
Antecedentes: La reforma de Francisco
Francisco ordenó los cambios tras una ola de escándalos, entre los que figura una operación inmobiliaria en Londres que costó cientos de millones de dólares a la Santa Sede. Su reforma centralizó la gestión financiera en el IOR como medida de control.
Cierre: Implicaciones de la nueva norma
La decisión implica una descentralización de la gestión financiera vaticana. El especialista Ed Condon señaló que el Papa parece confiar en la capacidad de los departamentos para administrar sus carteras, como se hacía antes de la reforma de Francisco.