Gobierno aprueba crédito de $us 74,8 millones para carretera Okinawa-Los Troncos

La CAF financiará 30 km de vía clave para el transporte agrícola en Santa Cruz, mejorando la conexión entre zonas productoras y mercados.
El Deber

Gobierno aprueba crédito de $us 74,8 millones para carretera Okinawa-Los Troncos

La CAF financiará 30 km de vía clave para el transporte agrícola en Santa Cruz. El Ejecutivo autorizó el préstamo el 9 de abril mediante decreto. La obra mejorará la conexión entre zonas productoras y mercados, actualmente intransitable en lluvias.

«Una vía para sacar los alimentos del Norte Integrado»

El Decreto Supremo N°5371 transfiere los recursos a la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) como organismo ejecutor. La ruta forma parte de la Red Vial Fundamental (Ruta 10) y conectará los corredores Este-Oeste y Norte-Sur. «Promoverá las exportaciones al integrar áreas de oleaginosas, ganadería y bosques», señala el texto oficial.

Trámite pendiente

El contrato con la CAF debe ser aprobado aún por la Asamblea Legislativa Plurinacional. El tramo de 30 km completará la conexión iniciada en 2017 con el Puente Banegas, que ya une Okinawa con la carretera a Beni y la Chiquitania.

Un puente que espera su camino

El Puente Banegas, inaugurado en 2017 sobre el Río Grande, quedó como «isla» sin la carretera operativa. Actualmente, el tramo terrestre se vuelve impracticable en invierno, afectando el transporte de productos. Paralelamente, la ABC invertirá Bs 6,9 millones en reparar juntas del puente, dañadas por condiciones climáticas en 2020.

La cosecha necesita salida

Santa Cruz concentra el 70% de la producción agrícola boliviana. El Norte Integrado y la zona Este son los mayores productores de alimentos del país, pero enfrentan limitaciones logísticas. La obra busca reducir costos y tiempos para exportadores y mercados internos.

Un paso más en la red vial

La eficacia del proyecto dependerá de su ejecución oportuna. Concluida la obra, se espera que disminuya el aislamiento de zonas productivas y optimice la cadena de suministros, aunque su impacto real se medirá tras la próxima temporada de lluvias.