Searpi detecta desvío del Río Grande y senadores exigen acciones
El Searpi reportó el desvío de los caudales del Río Grande hacia los ríos Ibare y Mamoré. Esta modificación, causada por intervención humana, puede ocasionar inundaciones a gran escala en el sur del Beni, afectando a la producción y poblaciones.
Actuación política inmediata
Los senadores Fernando Vaca y Walter Justiniano denunciaron la situación en el pleno de Senadores. Exigieron a las autoridades nacionales y departamentales que asuman acciones para evitar una tragedia durante la temporada de lluvia.
Medidas concretas
Justiniano informó que se remitió notas a los ministros de Medio Ambiente y Agua, de Defensa y de Desarrollo Rural y Tierras, además de a las autoridades de Santa Cruz y Beni, para sostener una reunión la próxima semana.
El origen del problema
El Searpi detectó intervención antrópica que modifica el cauce normal del Río Grande. Esta acción genera sistemas de deflexión y diques sin autorización de la institución competente.
Infraestructura no autorizada
El estudio identificó la construcción de deflectores y al menos 15 diques. Estas estructuras de hormigón reconducen los caudales del Río Grande hacia los afluentes Mamoré e Ibare.
Consecuencias para el Beni
La modificación del cauce pone en riesgo a todo el sector sur del departamento del Beni. El desvío puede provocar inundaciones que afecten la producción arrocera y ganadera, así como a las poblaciones asentadas en el territorio sur.
Implicaciones regionales
La situación requiere una coordinación interdepartamental urgente entre Santa Cruz y Beni para prevenir daños mayores en la próxima temporada de lluvias, con posibles repercusiones económicas y sociales.