Sindicatos franceses convocan huelga general contra recortes presupuestarios
900.000 manifestantes en toda Francia. La protesta se produce tras la caída del gobierno de Bayrou y en un contexto de ausencia de presupuesto.
Movilización sindical sin interlocutor
Los sindicatos mantuvieron la convocatoria de huelga y manifestación para el 18 de septiembre pese a la ausencia de un gobierno formado. Su objetivo es establecer un equilibrio de poder e influir en las futuras decisiones del nuevo primer ministro, Sébastien Lecornu.
Preparativos para la violencia
Las autoridades prevén la presencia de unos 8.000 ‘casseurs’ (vándalos). En París, muchos comercios han protegido sus escaparates con madera ante el temor a saqueos. La policía y la gendarmería están desplegadas con el objetivo de contener a los violentos a toda costa.
Bloqueos y repercusión nacional
Se planean cerca de 250 marchas y concentraciones en todo el país. Los ‘bloqueadores’ intentarán paralizar rotondas, carreteras principales y lugares estratégicos, como depósitos de petróleo y la circunvalación de París.
Antecedentes de la protesta
Los sindicatos denunciaron las medidas presentadas en el presupuesto por el anterior gobierno como ‘inaceptables y de una brutalidad sin precedentes’, lo que motivó la convocatoria inicial de la huelga.
Implicaciones de la jornada de protesta
La jornada supone una prueba para las centrales obreras y para las fuerzas del orden. El Ministerio del Interior advierte de un riesgo considerable de perturbaciones del orden público debido a la infiltración de grupos radicales en las marchas oficiales.