Economía global muestra divergencias con fuerte consumo en EE.UU. en agosto
Las ventas minoristas en EE.UU. aumentaron un 0,6% en agosto. La economía global presenta un panorama desigual, con un consumo robusto en América, una recuperación industrial modesta en Europa y vientos en contra comerciales en Asia.
Impulso sostenido en Estados Unidos
El gasto de los consumidores estadounidenses se mantiene fuerte a pesar de los mayores costes de endeudamiento. Las ventas minoristas subieron un 0,6% interanual, superando las previsiones, mientras que las ventas básicas sin autos ni combustible aumentaron un 0,7%. La producción industrial avanzó un 0,1% y la Reserva Federal de Atlanta revisó al alza su previsión de crecimiento para el tercer trimestre hasta el 3,4%.
Mejora frágil en Europa
La producción industrial de la zona del euro creció un 0,3% en julio. El índice de sentimiento del inversor ZEW de Alemania mejoró, aunque las valoraciones de las condiciones actuales empeoraron. La presión salarial persistente se mantiene, con un aumento de los costes laborales del 3,6% en la zona del euro.
Señales mixtas en Asia
El déficit comercial de Japón se redujo debido a una caída de las importaciones del 5,2%, lo que indica una débil demanda interna. Por su parte, las exportaciones no petroleras de Singapur se desplomaron un 11,3% interanual, mostrando su vulnerabilidad a la desaceleración del comercio global de bienes.
Antecedentes del panorama económico
Los datos del día revelaron una economía mundial que depende en gran medida de los consumidores de EE.UU., cuyo gasto está enmascarando debilidades en otras regiones, como la lenta recuperación industrial europea y la disminución de la demanda en Asia.
Implicaciones para la economía global
El patrón subyacente es de desequilibrio, donde el consumo estadounidense actúa como principal motor de crecimiento. Esto plantea interrogantes sobre la sostenibilidad de esta dependencia y la capacidad de otras regiones para recuperar su impulso económico propio.