Pegasus espió a 1.223 usuarios de WhatsApp en 51 países

Documentos judiciales revelan que el spyware Pegasus atacó a periodistas y activistas en 2019, con México e India como los países más afectados.
TechCrunch
Un teléfono móvil sobre un teclado, con una lupa enfocando el icono de una aplicación de mensajería.
Imagen que captura un teléfono móvil situado sobre un teclado de ordenador, amplificado por una lupa centrada en la aplicación de mensajería.

Pegasus espió a 1.223 usuarios de WhatsApp en 51 países en 2019

El spyware de NSO Group atacó a periodistas y activistas. Según documentos judiciales publicados el 9 de abril de 2025, México e India fueron los países más afectados. La demanda de Meta revela el alcance global del software de vigilancia.

«Una radiografía del espionaje masivo»

Un documento judicial confirmó que 1.223 usuarios de WhatsApp fueron infectados con Pegasus en solo dos meses (abril-mayo de 2019). «La lista muestra la verdadera escala del problema», afirma la experta Runa Sandvik. México lidera con 456 víctimas, seguido por India (100) y Bahrein (82).

Países con más objetivos

La tabla «Victim Country Count» detalla blancos en España (12), Países Bajos (11) y EE.UU. (1). NSO Group desconectó a 10 clientes gubernamentales por abusos, según revelaciones previas del caso. La licencia anual del software costaba hasta 6,8 millones de dólares.

Claves de una demanda histórica

WhatsApp demandó a NSO Group en 2019 por explotar una vulnerabilidad. En 2024, un juez estadounidense dictaminó que la empresa violó leyes de hacking. La próxima audiencia determinará la indemnización, tras generar ya 31 millones en ingresos para NSO en 2019.

Espionaje sin fronteras

El spyware se usó contra más de 100 activistas y periodistas, aunque la presencia de víctimas en un país no implica que su gobierno fuera el cliente. Siria figura en la lista pese a las sanciones internacionales que prohibirían exportarle la tecnología.

Un caso que marca precedente

El fallo contra NSO Group sienta un hito legal en la lucha contra la vigilancia ilegal. La escala de los ataques revela el desafío global para proteger la privacidad digital, especialmente de grupos vulnerables.