Terremoto de magnitud 6,0 causa más de 800 muertos en Afganistán
El seísmo, con epicentro en Nangarhar, ha dejado también unos 2.700 heridos. Ocurrió la noche del domingo y ha provocado deslizamientos que dificultan las labores de rescate. El Gobierno talibán ha activado un comité de emergencia y ha asignado fondos para la ayuda.
Una noche trágica en el este del país
Un terremoto de magnitud 6,0 seguido de réplicas sacudió el este de Afganistán la noche del domingo 31 de agosto. El portavoz talibán Zabihullah Mujahid confirmó que el balance provisional asciende a 812 fallecidos y 2.700 heridos. La provincia de Kunar es la más afectada, con 800 muertos y 2.500 heridos, seguida de Nangarhar, con 12 y 255 respectivamente. Las autoridades advierten de que las cifras «no son definitivas y podrían aumentar».
Dificultades en el rescate
Las operaciones de rescate se ven dificultadas por los deslizamientos de tierra que han bloqueado carreteras, impidiendo el acceso a zonas remotas. El Gobierno talibán ha desplegado helicópteros para evacuar víctimas y los hospitales locales, como el de Jalalabad, están desbordados. Miles de familias han quedado sin techo y necesitan urgentemente alimentos, agua y asistencia médica.
Movilización nacional e internacional
El Ejecutivo talibán anunció la creación de un comité especial de emergencia y la asignación de 1.000 millones de afganis (unos 14 millones de dólares) para atender a las familias damnificadas, con compromiso de ampliar los fondos. Organizaciones como la ONU, UNICEF, la OIM y la Media Luna Roja tienen equipos desplegados para coordinar la ayuda. Países como Pakistán, Irán, China, India, Siria, Egipto y la UE han expresado condolencias y ofrecido asistencia.
Un territorio familiarizado con la tragedia
Afganistán es uno de los países más vulnerables a los desastres naturales debido a la debilidad de su sistema sanitario, la pobreza y la falta de infraestructuras, agravado por la grave crisis económica desde 2021. La región se asienta sobre el Hindu Kush, una zona sísmica muy activa donde los temblores suelen ser poco profundos y, por tanto, más destructivos. La falta de recursos y equipos especializados complica la respuesta a catástrofes de esta magnitud.
Una larga recuperación por delante
La eficacia de la respuesta inmediata determinará el número final de víctimas, especialmente en las áreas más aisladas. La comunidad internacional se ha movilizado para apoyar las labores de rescate y proveer ayuda humanitaria esencial a una población que ya se encontraba en una situación de extrema vulnerabilidad.