Excura prófugo por abusar de 30 niños en Bolivia reside en Uruguay
Juan José San’Anna lleva 17 años oculto en casa de sus padres en Salto. El exsacerdote uruguayo fue denunciado en 2007 por abusos sexuales en un internado de Cochabamba. Interpol lo localizó, pero nunca fue detenido.
Una vida en la sombra lejos de la justicia
El exsacerdote uruguayo Juan José San’Anna, denunciado por abusar sexualmente de 30 niños en un internado de Tapacarí, Cochabamba, lleva 17 años prófugo de la Justicia boliviana. Según una investigación del diario uruguayo El País, se encuentra en la casa de sus padres en Salto, Uruguay, donde lleva una vida reservada, encerrado y saliendo solo ocasionalmente al atardecer.
Los hechos y la huida
Los abusos ocurrieron cuando San’Anna dirigía el ala masculina del Internado Ángel Gelmi. El arzobispo de Cochabamba, Tito Solari, confirmó los «abusos deshonestos» en una conferencia de prensa en noviembre de 2007, pidió perdón y anunció la expulsión del cura de la Iglesia, lo que se concretó en 2011. Para entonces, San’Anna ya había escapado de Bolivia en octubre de 2007.
El modus operandi y las acusaciones
Según testimonios de las víctimas, el sacerdote invitaba a niños de entre 6 y 18 años a ver videos a su cuarto, los encerraba con llave y los sometía a prácticas sexuales. Fue denunciado por delitos de violación y abuso deshonesto. La Justicia boliviana lo declaró rebelde e Interpol lo localizó en Uruguay, pero permaneció libre.
Un pasado que reaparece
San’Anna llegó a la localidad pobre de Tapacarí en 2005. El caso se destapó, según dos versiones, porque una religiosa del internado lo encontró en una situación comprometedora con un interno o porque un adolescente le narró lo sucedido. Deprimido, San’Anna confesó a religiosos que se entregaría si lo ayudaban con lo que consideraba «una enfermedad», pero huyó antes de que la iglesia avisara a la Policía.
Encuentros incómodos y evasivas
El excura ha sido encontrado en tres ocasiones por periodistas. En 2010 admitió a un medio uruguayo: «Son ciertas. Estoy muerto». En 2023, a un periodista boliviano de El Deber le dijo que estaba «destrozado» y que la situación fue un «mazazo terrible» para su familia. En el encuentro más reciente con El País, insistió en que «preferiría no decir nada» y argumentó que hablar sería «generar un dolor».
Un refugio tranquilo para una condena pendiente
El excura uruguayo Juan José San’Anna se encuentra en un limbo legal, residiendo en su país de origen mientras la justicia boliviana lo mantiene declarado rebelde por las graves acusaciones de abuso sexual contra 30 menores en un internado de Cochabamba.
La impunidad tiene una dirección conocida
El caso evidencia las dificultades en la cooperación internacional para perseguir delitos de abuso sexual. A pesar de tener una ubicación conocida y haber sido localizado por Interpol, San’Anna no ha enfrentado a la justicia boliviana, dejando a las víctimas sin un cierre judicial tras 17 años.