Internos revelan red de policías corruptos en penal de San Pedro
Uniformados facilitan el ingreso de estupefacientes a cambio de sobornos. Internos y exreclusos relataron el mecanismo de extorsión, mientras las autoridades penitenciarias defienden las medidas de control implementadas.
El precio de la libertad dentro de la cárcel
Jonás, un exinterno que cumplió condena por narcotráfico, contó que desde 2018 vendía droga en la sección Guanay. Tras una intervención, un teniente y dos sargentos lo llevaron a un cuarto donde el oficial soltó la frase clave: “Y ahora cómo arreglamos esto”. Jonás señaló que ofreció 5.000 bolivianos escondidos en su celda. “Cuando le dije eso, al teniente se le agrandaron los ojos, e inmediatamente me dijo: ve a tu celda y regresas rápido”.
Un sistema de cuotas establecido
El exinterno detalló que, tras el pago inicial, el oficial accedió a devolverle todo lo incautado: droga, celulares y una gramera. “Desde entonces tuve que pagar cuotas fijas a los policías para que no me molestaran”. Este relato evidencia un esquema de corrupción sistemático que permite la venta de estupefacientes dentro del penal.
Un problema de larga data
El penal de San Pedro ha sido escenario de numerosas notas relacionadas que detallan su colapso, incluyendo elecciones internas con regalos de droga para captar votos, consumo de alcohol y estupefacientes, y un aumento de heridos y muertos durante fiestas. Las autoridades penitenciarias, sin embargo, defienden las medidas de control implementadas en los últimos años.
Una realidad que persiste tras las rejas
La denuncia presenta una clara contradicción entre los operativos oficiales de control y las prácticas de corrupción descritas por los internos. La repercusión para el ciudadano es la persistencia de un sistema penitenciario donde la ley no se aplica de manera uniforme, permitiendo que actividades ilícitas operen bajo la complicidad de algunos uniformados.