Ministerio de Salud de Bolivia confirma 254 casos nacionales de sarampión
Santa Cruz concentra 214 de los 254 casos confirmados. El viceministro Max Enríquez reportó el incremento este 19 de agosto. Las autoridades impulsan una nueva fase de vacunación gratuita para el grupo de 1 a 19 años y un protocolo de bioseguridad para unidades educativas.
Un virus que avanza
El Ministerio de Salud y Deportes, a través del viceministro Max Enríquez, declaró que el virus del sarampión continúa circulando en Bolivia. El reporte, actualizado hasta agosto de 2025, detalla que más del 85% de los contagios corresponden a personas entre 1 y 19 años, identificándolos como el grupo prioritario para la acción inmediata.
Distribución territorial del brote
El departamento de Santa Cruz es el epicentro del brote con 214 casos. Le siguen La Paz (14), Cochabamba (7), Potosí (6), Oruro (4), Beni (4), Chuquisaca (4) y Pando (1). Tarija es el único departamento que no registra casos.
Estrategia de contención: vacunas y protocolos
La respuesta se centra en dos frentes. Por un lado, la vacunación sigue siendo la estrategia más efectiva. Se anunció una nueva fase destinada al grupo de 1 a 19 años, con las vacunas SRP (para menores de 1 a 5 años) y SR (para el grupo de 5 a 14 años), las cuales son gratuitas y seguras.
Protocolo para unidades educativas
En paralelo, se potenciará el Protocolo de Bioseguridad para la Prevención del Sarampión en Instituciones Educativas. Este establece medidas como lavado de manos, uso de barbijos en situaciones de riesgo y desinfección de espacios. Se conformarán Comisiones de Salud y Bioseguridad en cada unidad educativa con participación de la comunidad educativa y centros de salud.
Un enemigo conocido
La circulación del virus del sarampión en el país ha llevado a la confirmación de casos en ocho de los nueve departamentos, evidenciando un brote activo que afecta principalmente a la población más joven y no vacunada.
Protección colectiva en marcha
El éxito de las medidas dependerá de la adherencia a la vacunación y a las normas de bioseguridad en los colegios. El objetivo final es garantizar la seguridad en la educación presencial y cortar la cadena de transmisión del virus.