Policía vincula al hijastro con el secuestro del empresario Baeza
El hijastro y sus abogados desaparecieron tras denunciar el crimen. La investigación revela una posible red familiar delictiva. Los captores exigieron 2 millones de dólares de rescate, según el ministro de Gobierno.
«Una trama con huellas familiares»
El ministro Roberto Ríos confirmó que el hijastro de Erick Roberto Baeza, Reny Pablo D. L., es sospechoso clave. Denunció la desaparición el 2 de agosto, pero luego evitó declarar junto a sus abogados, quienes también tienen antecedentes penales. «Su inasistencia refuerza la hipótesis de su participación», afirmó Ríos.
El vehículo y los antecedentes
La Policía identificó una vagoneta (placa 5996-FND) vinculada al secuestro, registrada a nombre de Olimpia S. R., investigada por legitimación de ganancias ilícitas. El esposo de esta, Hugo V. S. (con historial por narcotráfico), cargaba combustible al automotor. Ninguno de los implicados fue hallado en sus domicilios.
Abogados bajo la lupa
Los representantes legales del hijastro son Carlos Henry G. (candidato a diputado) y Óscar Erwin G., este último procesado por un caso de 1 millón de dólares. Ambos abandonaron sus viviendas y no colaboraron con la Fiscalía.
Rescate y operativos fallidos
Los secuestradores pidieron inicialmente 2 millones de dólares, pero redujeron la cifra al no recibir respuesta. La Policía rastreó la zona de Urubó sin éxito. Baeza sigue desaparecido, aunque Ríos descartó la participación de agentes policiales, como especulaban redes sociales.
Un modus operandi conocido
El caso refleja un patrón de redes criminales familiares en Bolivia, donde allegados de la víctima planean secuestros. Investigaciones previas ya habían vinculado a algunos implicados con narcotráfico y estafas millonarias.
Justicia en busca de respuestas
Las autoridades insisten en que el caso no quedará impune. Los allanamientos y el rastreo del vehículo continúan, mientras se analiza si el crimen está conectado con otros delitos en el país.