Bomberos de tres países compiten por el título alemán en deporte de rescate
620 deportistas participan en Torgau hasta el 2 de agosto. Bomberos de Alemania, Austria y República Checa miden sus habilidades en pruebas como carrera de obstáculos o simulacros de extinción. El evento combina tradiciones deportivas del este y oeste de Alemania.
«No es fútbol, es algo único»: disciplina y camaradería
Laura Wolf, competidora de 26 años, destaca que el deporte bomberil «le viene de familia». Participa junto a su hermana en el equipo de Mecklemburgo-Pomerania Occidental. Las pruebas exigen velocidad y precisión: desde escalar una casa de altura real hasta pasar un manguera como testigo en relevos.
Jueces rigurosos y espíritu de superación
Fred Langkabel, juez y exdeportista, subraya que «esto es deporte de élite». Los 50 árbitros vigilan cada detalle en pruebas donde, según él, «nadie se rinde, incluso arrastrándose en la última fase». La competición premia la camaradería tanto como los resultados.
Dos escuelas, un mismo objetivo
Silvia Oestreicher, portavoz de la Federación Alemana de Bomberos, explica que el este prioriza el atletismo y el oeste la práctica operativa. Los tres mejores equipos por categoría clasificarán para los campeonatos mundiales de la CTIF (Comité Técnico Internacional de Prevención y Extinción de Incendios).
Raíces que unen generaciones
El deporte bomberil en Alemania tiene décadas de historia, con diferencias marcadas por la división geopolítica hasta 1990. Hoy conviven ambas tradiciones, manteniendo viva una actividad que entrena habilidades reales para emergencias.
Más que medallas: preparación para salvar vidas
El evento en Torgau demuestra cómo el entrenamiento deportivo refuerza capacidades críticas en labores de rescate. Los participantes, todos bomberos en activo, llevan lo aprendido directamente a sus cuerpos de origen.