Inauguran en Borkum un memorial por los niños maltratados en centros de cura
Una estela conmemora a las víctimas de abusos en el antiguo Adolfinenheim. La instalación, presentada este miércoles, busca visibilizar el sufrimiento de miles de menores entre 1921 y 1996. La iniciativa partió de afectados y cuenta con el respaldo de la Iglesia y la Diaconía.
«Un símbolo para romper el silencio»
La estela, diseñada por el escultor Friedhelm Welge, se ubica en el terreno del excentro de cura infantil Adolfinenheim, gestionado por diaconisas de Bremen hasta 1980. Uwe Rüddenklau, de la Iniciativa Niños Desplazados, destacó que este acto es «un signo de colaboración exitosa» entre víctimas, Iglesia y sociedad. La Diaconía bremenesa asumió la responsabilidad histórica y financió un estudio sobre los hechos en 2023.
El trauma de las «curas»
Entre 8 y 12 millones de niños alemanes fueron enviados a estos centros postguerra, incluyendo 90.000 al Adolfinenheim. Bajo excusa médica, sufrieron castigos físicos, prohibición de hablar y aislamiento familiar. «Regresaban traumatizados», señala el texto. La mayoría tenía entre 2 y 14 años.
De la oscuridad a la memoria
Karin Altenfelder, directiva de la Diaconía, afirmó que el memorial «hace visible el dolor y la culpa». El espacio, abierto al público, forma parte de un esfuerzo por convertir instituciones religiosas en «lugares seguros». La investigación histórica reveló prácticas sistemáticas de maltrato durante 75 años.
Una herida colectiva
El Adolfinenheim operó desde 1921 hasta 1996, en un contexto donde las «curas infantiles» eran promovidas por médicos, padres y escuelas. Los menores, considerados «demasiado delgados o pálidos», eran separados de sus familias durante semanas.
Un paso, pero no el último
El memorial simboliza el inicio de un proceso de reparación más amplio. Rüddenklau advirtió que esto es «una coma, no un punto» en la reconciliación. La Diaconía mantiene su compromiso de transparentar lo ocurrido.