Doctor marroquí promueve convivencia en Torre Pacheco tras conflicto racista
Ahmed Jbara, médico en la localidad desde 2010, defiende que la integración depende del comportamiento, no del origen. Su clínica en el municipio murciano es un ejemplo de diversidad y refugio social tras los incidentes de hace dos semanas.
«Aquí se valora a quien suma, no a quien resta»
El doctor Jbara, formado en Marruecos y España, dirige la policlínica Avicena, que atiende a pacientes de múltiples nacionalidades. «Nunca te rechazan por raza o religión, sino por ser bueno o malo», afirma. Su centro, abierto desde 2021, ofrece servicios médicos completos y actúa como punto de encuentro intercultural.
Barreras y logros de la inmigración
Jbara destaca que la primera generación de migrantes magrebíes enfrentó dificultades con el idioma y la educación, pero subraya su voluntad de integrarse. «En medicina, entender al paciente es clave», explica. Ahora, las generaciones nacidas en España han superado esos obstáculos, aunque persisten retos como la sensación de inseguridad tras los recientes altercados.
Seguridad, el desafío pendiente
El médico atribuye los conflictos a la falta de medios policiales, no a tensiones sociales. «Vecinos autóctonos y migrantes comparten la misma preocupación», insiste. Reclama más efectivos de la Guardia Civil o Policía Nacional para garantizar la tranquilidad en el pueblo.
De los campos a la consulta
Torre Pacheco recibió hace décadas a jornaleros magrebíes con bajo nivel educativo. Hoy, sus hijos y nietos forman parte activa de la comunidad. La clínica de Jbara simboliza esta evolución: atendiendo a jubilados españoles y migrantes con la misma dedicación.
Un termómetro social en la sala de espera
La convivencia en Torre Pacheco, según Jbara, se ha normalizado tras el episodio violento. Su experiencia de 25 años en la región refuerza un mensaje: el respeto mutuo es posible cuando prima el carácter sobre el origen. La policlínica sigue siendo un espacio donde el idioma y la cultura se entrelazan sin conflicto.