Tesla se convierte en la marca de coches eléctricos más odiada
Un 39% de los consumidores tiene opinión negativa sobre la marca. La percepción empeoró por promesas incumplidas y el activismo político de Elon Musk. Un estudio con 8.000 encuestados revela que ocupa el último puesto en popularidad entre 19 fabricantes.
De admirada a rechazada: el declive de una marca
Hasta 2024, Tesla era una de las empresas más valoradas del sector, pero su reputación se desplomó al puesto 95 de 100 en 2025. El informe *Axios Harris Poll 100* señala que la caída coincide con el apoyo público de Musk a Donald Trump y su gestión en DOGE. «La intensidad de confianza en la marca es la más baja (-19) registrada», destaca el estudio.
Promesas que no llegan
El 48% de los consumidores desconfía de Tesla, especialmente por funciones como el Full Self-Driving (FSD), aún sin materializar. El 53% rechaza su nuevo servicio de robotaxi por preocupaciones de seguridad, tras accidentes mortales con Autopilot. «Ya no muestran interés por las novedades de la marca», concluye el informe.
Presión de los accionistas
El 61% de los inversores exige que Musk se aleje de la política y se centre en Tesla. Solo el 12% apoya su activismo, mientras el 43% celebra su salida de DOGE. La caída del 14% en entregas de vehículos refleja el impacto en el negocio.
Cuando la imagen pesa más que el producto
En 2021, Tesla era la novena marca más apreciada en EEUU. Su declive comenzó en 2024, cuando SpaceX (también de Musk) sufrió un deterioro similar. La polarización por su postura política y las críticas a sus condiciones laborales aceleraron el cambio de percepción.
¿Punto de no retorno?
El desafío ahora es recuperar la confianza perdida en un mercado cada vez más competitivo. Los datos sugieren que, incluso con mejoras técnicas, la marca necesita redefinir su relación con consumidores y accionistas para revertir la tendencia.