Madrid colapsa por obras en carreteras, Metro y Cercanías este verano
La ciudad sufre cortes generalizados en transporte y tráfico. Obras simultáneas en la A-5, Líneas 6 y 7 de Metro y Cercanías generan caos. Vecinos y viajeros expresan hartazgo por los retrasos y desvíos.
«Mires donde mires, hay obras»
Madrid vive un verano de reformas masivas que afectan a carreteras, transporte público y espacios urbanos. «Da igual que utilices coche o Metro: todo está colapsado», describe el artículo. Los cortes en la A-5 (reducida a dos carriles) y el cierre parcial de la Línea 6 del Metro (400.000 afectados) son los puntos críticos.
Problemas en coche y transporte público
El soterramiento de la A-5 y las obras en Ventas y Cuatro Torres obligan a desvíos sinuosos. En transporte público, además de la Línea 6, la Línea 7 de Metro tendrá estaciones cerradas desde julio, y Cercanías sufre cortes en la C-5 y el túnel de Sol.
Intercambiadores en obras y protestas vecinales
Chamartín y Conde de Casal (A-3) están en remodelación, complicando conexiones. Vecinos de Alcorcón piden usar terrenos militares como aparcamientos disuasorios. El 21 de julio, fallos en Metro y Bicimad colapsaron el suroeste de la ciudad.
Un verano que no será tranquilo
Madrid afronta su mayor ola de reformas en décadas, con proyectos como el soterramiento de la M-30 en Ventas o la Línea 7B del Metro (paralizada por daños en viviendas). La saturación en redes sociales refleja el malestar por los retrasos y trenes abarrotados.
Obras que no dan tregua
El impacto en la movilidad es generalizado: desde el tráfico rodado hasta Metro y Cercanías. Aunque algunas reformas buscan mejorar infraestructuras (como zonas verdes en Cuatro Torres), la ejecución simultánea ha convertido la ciudad en una «gymkana» diaria para sus habitantes.