Gobernador de Beni acusa al Gobierno por falta de ayuda en inundaciones

El gobernador de Beni, Alejandro Unzueta, denuncia falta de coordinación y apoyo del Gobierno nacional ante las inundaciones que afectan a tres municipios.
unitel.bo
Dos hombres hablando en micrófonos en diferentes contextos.
Imagen de dos hombres en distintas escenas, ambos utilizando micrófonos, uno con fondo verde y otro con fondo naranja.

Gobernador de Beni acusa al Gobierno de no coordinar ayuda por inundaciones

Alejandro Unzueta denuncia falta de apoyo nacional ante el desastre declarado. El viceministro Calvimontes responde que no recibieron solicitud formal. La crisis afecta a tres municipios por lluvias y desbordes de ríos. Publicado hoy en base a declaraciones cruzadas.

\»Nos saltan en la coordinación\», reclamo del gobernador

El gobernador de Beni, Alejandro Unzueta, afirmó que \»el viceministro de Defensa Civil nunca coordinó con nosotros\» durante las emergencias por inundaciones. Acusó al Gobierno de priorizar ayuda a municipios afines al MAS, como Guayaramerín, mientras Rurrenabaque y Reyes reciben \»poca o nada de ayuda\». \»Le mienten al presidente Luis Arce\», sostuvo.

Respuesta del viceministro

Juan Carlos Calvimontes negó las acusaciones: \»No hay ninguna carta de la Gobernación solicitando apoyo\». Cuestionó que Beni \»demoró en declarar el desastre\», mecanismo clave para liberar recursos. Sobre las críticas de parcialidad, argumentó que \»se ayuda a los municipios que solicitan asistencia\», aprovechando aeropuertos operativos como los de Guayaramerín y Rurrenabaque.

Antecedentes

Beni enfrenta inundaciones históricas con ríos desbordados en tres municipios, agravadas por lluvias persistentes. La declaratoria de desastre busca acelerar la respuesta, pero el conflicto revela tensiones previas: Unzueta recordó que ya durante los incendios forestales recibieron \»poca ayuda\» del nivel central.

Cierre

La disputa retrasa la asistencia a miles de afectados mientras persisten las lluvias. La falta de documentación formal y los reproches mutuos complican la gestión de una crisis que ya supera la capacidad departamental.