Alemania lanza plan de pensiones infantil para invertir en bolsa

El gobierno alemán destinará 10 euros mensuales por niño desde 2026 en un plan que fomenta la inversión en fondos indexados, buscando corregir errores de sistemas anteriores.
DIE ZEIT

Alemania lanza plan de pensiones infantil para fomentar inversión en bolsa

El gobierno germano destinará 10 euros mensuales por niño desde 2026. La «Frühstart-Rente» busca corregir errores del fallido sistema Riester mediante formación práctica en mercados financieros. Expertas advierten que su éxito dependerá de evitar burocracia y productos costosos.

«Una oportunidad generacional con riesgos conocidos»

La iniciativa, propuesta por el Sachverständigenrat Wirtschaft, pretende que «todos los niños acumulen experiencia directa con inversiones» mediante aportes estatales en fondos indexados. Ulrike Malmendier, economista clave del proyecto, insiste en que «las garantías de capital son contraproducentes para horizontes de décadas».

Mecanismos clave

El sistema operaría automáticamente mediante identificación fiscal para evitar exclusión de familias vulnerables. Contrasta con el modelo Riester, que «requería trámites complejos y favorecía productos caros». Los fondos permanecerían bloqueados hasta la mayoría de edad, cuando podrán transferirse a planes privados.

Lecciones no aprendidas

El texto alerta sobre 1.400 millones de libras abandonados en cuentas infantiles británicas no reclamadas. Para evitarlo, propone «integrar esta renta en una estrategia vitalicia de ahorro», acompañada de educación financiera escolar práctica.

De la teoría a la cartera

Alemania registra una de las tasas más bajas de inversión minorista en bolsa de Europa occidental (15% según Bundesbank). La Riester-Rente, lanzada en 2002, solo captó al 36% de la población objetivo debido a su complejidad y altas comisiones.

El reloj corre para la próxima generación

El éxito del proyecto dependerá de su implementación técnica y continuidad política. Las autoras subrayan que solo un diseño simple y universal evitará repetir los errores que lastraron reformas anteriores. Los primeros resultados se medirían hacia 2040, cuando los beneficiarios iniciales alcancen edad laboral.