Demanda de créditos estudiantiles en Alemania cae a mínimo histórico
Solo 12.965 nuevos contratos en 2024 frente a 60.000 hace una década. El alto interés del crédito estatal KfW (6,31%) y una ayuda máxima de 650€ mensuales, sin actualizar en 20 años, ahuyentan a los estudiantes. Expertos alertan de riesgos como empleos precarios o abandono de estudios.
«La KfW deja a los estudiantes bajo la lluvia»
El Centrum für Hochschulentwicklung (CHE) revela que la demanda de créditos estudiantiles en Alemania se ha desplomado un 78% desde 2014. «El oferta estatal se acerca a cero», afirma Ulrich Müller del CHE. La KfW, principal proveedor público, mantiene condiciones «poco atractivas»: 6,31% de interés efectivo y una ayuda mensual congelada en 650€ desde 2005, pese a que la inflación exigiría 1.000€.
Promesas incumplidas y consecuencias
El gobierno alemán prometió en 2021 mejorar las condiciones, pero no ha implementado cambios. El Ministerio de Educación no respondió al CHE sobre posibles reformas. Actualmente, solo 29.000 estudiantes usan este crédito, frente a 210.000 que aún lo pagan. «Sin alternativas, muchos optarán por trabajos extras o abandonar», advierte Müller.
Un sistema que no sigue el ritmo
Alemania cuenta con otros sistemas de ayuda (Bafög, becas), pero el crédito KfW era clave para cubrir brechas. Su diseño obsoleto contrasta con la inflación y los costes actuales de vida. En 2024, representa solo el 6% de los contratos que tenía hace diez años.
¿Quién financiará los estudios ahora?
El desplome de la demanda evidencia una crisis en el acceso a la educación superior. Sin reformas, los estudiantes dependerán más de recursos privados o familiares, aumentando las desigualdades. El CHE urge actualizar los montos y tasas para evitar un «efecto dominó» en la formación profesional.