Huelga de controladores franceses colapsa el tráfico aéreo europeo
Uno de cada tres vuelos en España se vio afectado. El paro del 3 y 4 de julio provocó cancelaciones masivas y retrasos de hasta 49 minutos. Turistas y aerolíneas critican el impacto en plena temporada vacacional.
«El talón de Aquiles del cielo europeo»
La huelga convocada por los sindicatos UNSA-ICNA y USAC-CGT paralizó el 25% de los vuelos en 11 aeropuertos franceses. La DGAC ordenó cancelar el 40% de operaciones en París. «Más de 1.500 vuelos suspendidos y 300.000 pasajeros perjudicados», según Airlines for Europe (A4E).
España, segundo país más afectado
La Asociación de Líneas Aéreas (ALA) confirmó que el 31% de los vuelos con salida o llegada a España sufrieron retrasos (media de 49 minutos). Eurocontrol registró 3.343 vuelos menos en Francia y 1.206 sobrevuelos cancelados.
Críticas del sector
Ryanair denunció que «es inaceptable cancelar vuelos que solo sobrevolaban Francia». ALA exigió proteger los sobrevuelos, como ya hacen Italia o Grecia. «Los ciudadanos no pueden ser cautivos de estos paros», declaró su presidente.
Un conflicto con raíces profundas
La huelga surgió tras el fracaso de negociaciones entre controladores y la DGAC para mejorar condiciones laborales. Francia concentra el mayor tránsito aéreo de Europa, lo que amplifica el impacto de sus protestas.
Vacaciones en el limbo
El caos evidenció la fragilidad del sistema ante conflictos laborales. Con el turismo como motor económico, la UE enfrenta presiones para regular huelgas que trascienden fronteras.