YPFB reconoce déficit de 300 millones de dólares en importación de diésel
Las filas en surtidores persisten por falta de pago a proveedores. El presidente de la estatal petrolera atribuye el problema a limitaciones presupuestarias del Ministerio de Economía. Mientras, el Gobierno anuncia que la solución estructural quedará en manos del próximo mandato.
«Despachamos al 100%, pero no podemos reducir filas sin más recursos»
Armin Dorgathen, presidente de YPFB, confirmó que el déficit acumulado en importaciones de diésel alcanza los 300 millones de dólares. Aunque la empresa abastece la demanda actual, «no se realiza un sobredespacho que elimine las colas» por restricciones financieras. La gasolina, en cambio, mantiene suministro normal.
El rol clave del Ministerio de Economía
Dorgathen enfatizó que la capacidad de importar combustibles depende exclusivamente de los fondos asignados por el Ministerio de Economía y el BCB. «Para eliminar las filas en una semana, necesitaríamos despachar entre un 105% y 110%», explicó, pero ello requiere inyección adicional de capital.
Un legado petrolero pendiente
El ejecutivo señaló que el Gobierno actual dejará al próximo la tarea de resolver el suministro estructural, aunque destacó avances: la producción de petróleo subió de 2.800 a 3.100 barriles diarios desde 2024. Además, mencionó dos nuevas cuencas en exploración que entrarían en producción en 2028.
Descartan crisis de gas natural
Dorgathen negó que Bolivia deba importar gas a partir de 2028, salvo que «el próximo gobierno privatice YPFB». Recalcó mejoras logísticas en importación de carburantes y recordó que en 2006 la producción era de 10.000 barriles diarios, frente a los 2.800 de 2023.
De la escasez a la reactivación
Bolivia enfrenta una caída histórica en producción petrolera desde 2006, agravada por la pandemia. La actual gestión priorizó exploración (18 pozos nuevos) y biodiesel, pero la dependencia de importaciones sigue siendo crítica, especialmente para el diésel usado en transporte pesado.
La pelota está en el tejado del próximo gobierno
El desabastecimiento de diésel evidencia tensiones entre capacidad operativa de YPFB y limitaciones fiscales. Mientras las colas continúan, la solución definitiva quedará supeditada a las decisiones del próximo mandato y al desarrollo de las nuevas cuencas petroleras.