EasyJet incentiva a empleados por detectar maletas excesivas

EasyJet bonifica a empleados por interceptar equipajes de mano que exceden las medidas, generando polémica por la presión sobre pasajeros y trabajadores.
xataka.com

EasyJet incentiva a empleados por detectar maletas de mano excesivas

Los trabajadores reciben 1.20 libras por cada equipaje interceptado. La práctica, vigente en aeropuertos del Reino Unido, ha generado polémica por convertir al personal en «recaudadores» de multas. EasyJet alega que no supervisa las bonificaciones.

«Un modelo oculto tras las medidas de equipaje»

Un informe reveló que empresas como Swissport y DHL Supply Chain bonifican con 1 libra neta por maleta retenida en puertas de embarque. La política, activa desde 2023, opera en aeropuertos como Gatwick, Birmingham y Mánchester. «Los empleados cobran 12 libras la hora y enfrentan situaciones tensas con pasajeros», según The Guardian.

Presión y conflicto en la puerta de embarque

Testimonios recogidos por la prensa describen un ambiente proclive al abuso verbal, especialmente con grupos como despedidas de soltero. EasyJet permite una bolsa pequeña gratis, pero cobra 48 libras si el equipaje excede las medidas y no fue declarado. «Es un castigo económico más que una tarifa transparente», señala el informe.

Las aerolíneas low cost bajo escrutinio

Swissport defiende que solo aplica normas de EasyJet, mientras la aerolínea afirma que no gestiona remuneraciones de agentes externos. Aseguran que sus políticas son claras y que solo «una pequeña proporción de clientes» paga recargos. El sistema de incentivos reabre el debate sobre la ética del modelo low cost.

De la eficiencia a la monetización agresiva

Las aerolíneas de bajo coste construyeron su modelo con tarifas básicas y servicios desagregados, pero esta práctica convierte la puerta de embarque en un punto de fricción. El esquema, que premia la vigilancia punitiva, genera recelo entre pasajeros y empleados, según analistas.

Maleteros con incentivos, viajeros con recelos

La revelación muestra cómo algunas compañías monetizan cada aspecto del viaje. Aunque la aplicación estricta de normas es necesaria, las bonificaciones por penalizar al pasajero alteran el equilibrio entre control y servicio, creando una atmósfera de desconfianza mutua.