Super PAC pro-Trump rechaza financiación de tecnológicos globalistas
El grupo FSD excluye a donantes partidarios de inmigración cualificada y energías renovables. La medida surge tras la ruptura de Elon Musk con Trump y su creación del America Party. Analistas dudan del impacto real de la nueva formación política.
«No queremos a los ‘tech bros’ en nuestro movimiento»
James Fishback, líder del super PAC FSD («Full Support for Donald»), declaró que rechazarán fondos de «capitalistas globalistas» partidarios de políticas como visas H-1B o subsidios a vehículos eléctricos. «Si no eres un republicano real, no te queremos», afirmó en entrevista con POLITICO. El grupo busca proteger a candidatos afines a Trump frente a posibles desafíos del America Party de Musk.
Reacciones desde la costa oeste
El gobernador de California, Gavin Newsom, restó importancia al nuevo partido: «He visto esfuerzos así fracasar antes». Por su parte, Musk confirmó que incluirá en su agenda investigar más sobre Jeffrey Epstein, según reveló en redes sociales.
Trump vs. Musk: la grieta que divide al mundo tech
El expresidente calificó de «ridículo» el America Party y pronosticó su fracaso. La ruptura entre ambos ha generado tensiones en el sector tecnológico, tradicional aliado de Trump. Ninguno de los grandes donantes de Musk en 2024 respondió cuando POLITICO les preguntó si apoyarían su nueva iniciativa.
Una apuesta con obstáculos históricos
EEUU tiene un largo historial de intentos fallidos por crear terceros partidos. Expertos señalan que, pese a la fortuna personal de Musk, la falta de estructura y apoyo popular limitan sus opciones. El America Party carece aún de plataforma definida, aunque Musk sugiere enfocarse en eficiencia gubernamental y desregulación energética.
¿Distracción o amenaza real?
FSD planea contrarrestar a Musk con campañas puerta a puerta en distritos clave. Fishback advierte que solo necesitan convencer al 10% de los votantes para alterar el equilibrio en el Congreso. Mientras, inversores como Azoria (mayor accionista de Tesla) expresan preocupación por el doble rol de Musk como CEO y líder político.