Transportistas soportan filas de tres días por escasez de diésel en Santa Cruz
YPFB admite falta de recursos para cubrir la demanda. Camioneros y conductores esperan hasta 72 horas para abastecerse, afectando el transporte de granos. La estatal petrolera opera al 100% de su capacidad, pero requiere un 10% más para normalizar el suministro.
«Llegamos hace horas, pero esto es ver hasta qué hora»
En la carretera a Camiri (Km13), decenas de vehículos forman filas dobles que se extienden por días. Orlando Velasco, transportista de granos, relata: «Siempre es así: tres días, cuatro días». Los conductores acampan cerca de surtidores, sin certeza de cuándo podrán cargar combustible.
Limitaciones presupuestarias
El presidente de YPFB, Armin Dorgathen, reconoce que la empresa opera con un déficit de $us 300 millones. «Para eliminar las filas necesitaríamos despachar al 110%, pero no hay fondos», explica. Además, denuncia que el acopio ilegal de diésel distorsiona la demanda.
Impacto en la cadena logística
La escasez aumenta los costos del transporte y retrasa el traslado de mercancías, especialmente en regiones productivas como Santa Cruz. YPFB atribuye el problema a asignaciones insuficientes del Ministerio de Economía.
Una crisis que se arrastra
En el primer semestre de 2025, YPFB operó al 60%-70% de la capacidad requerida, generando desabastecimiento crónico. La estatal prioriza surtidores clave, pero la demanda supera la oferta.
Sin soluciones inmediatas a la vista
Mientras YPFB depende de fondos estatales, transportistas y empresarios enfrentan pérdidas por parálisis logística. La normalización del suministro requeriría inyecciones de capital no contempladas en el presupuesto actual.