Brechas de género en Bolivia: avances y desafíos en políticas de cuidado

Un estudio revela que las empresas bolivianas avanzan en políticas de cuidado, pero persisten brechas de género en el mercado laboral. Propuestas para lograr equidad y mejorar la productividad.
Agencia de Noticias Fides - Bolivia
Personas sentadas en una sala de conferencias con un panel de discusión al frente.
Imagen de una conferencia donde se discute el papel de las empresas en la transformación de los roles de género.

Empresas bolivianas avanzan en políticas de cuidado, pero persisten brechas de género

Un estudio presentado por Pro Mujer y CECI Tea Weeb, con apoyo del gobierno de Canadá, revela que, aunque las empresas bolivianas están implementando políticas de cuidado y conciliación laboral, aún existen desafíos significativos para lograr una verdadera equidad de género. La investigación, realizada en Cochabamba, El Alto, La Paz y Santa Cruz, analiza cómo el sector privado puede contribuir a la redistribución del trabajo de cuidado y a la transformación de roles de género.

Brechas persistentes en el mercado laboral

El estudio destaca que las mujeres dedican más tiempo al trabajo no remunerado, como el cuidado del hogar y la familia, lo que limita su participación en el mercado laboral. En ciudades como La Paz, Cochabamba y Santa Cruz, solo el 45,8% de las mujeres tienen empleos remunerados, frente al 55,6% de los hombres. Además, los hombres disponen de casi dos horas más al día para trabajos pagados, mientras que las mujeres dedican más de tres horas adicionales a labores de cuidado no remuneradas.

Estas cifras reflejan una realidad que no solo afecta a las mujeres, sino también al desarrollo económico del país”, señaló una de las investigadoras durante la presentación del informe. La falta de políticas efectivas de conciliación laboral y familiar sigue siendo un obstáculo para la equidad de género en el ámbito laboral.

Políticas de cuidado: un camino hacia la equidad

El estudio propone que las empresas promuevan el cuidado desde tres dimensiones clave: tiempo, dinero y servicios. Esto incluye la extensión de licencias, flexibilidad horaria, asignaciones económicas para cubrir costos de cuidado y la creación de espacios como guarderías y salas de lactancia dentro de las empresas. Estas medidas no solo benefician a las trabajadoras, sino que también mejoran el clima laboral y aumentan la productividad.

Sin embargo, solo el 23% de las empresas analizadas llevan un registro del uso de estos beneficios, lo que dificulta evaluar su impacto real. Además, el 30% de los trabajadores desconocen sus derechos en materia de conciliación laboral, lo que evidencia la necesidad de mayor difusión y capacitación.

Beneficios para las empresas que cuidan

Las empresas que implementan políticas de cuidado no solo mejoran su reputación, sino que también ven un aumento en la productividad y la fidelización de sus empleados. Según datos de Gallup (2024), las empresas con trabajadores comprometidos superan en un 202% en rendimiento financiero a aquellas que no lo están. Además, se reduce el ausentismo y se fomenta un ambiente laboral más colaborativo y creativo.

Atender las necesidades de cuidado de los trabajadores no es solo una cuestión de responsabilidad social, sino también una estrategia inteligente para el crecimiento empresarial”, afirmó un representante de Pro Mujer durante la presentación.

Desafíos y oportunidades

A pesar de los avances, el estudio identifica que la transformación de roles de género dentro de las empresas sigue siendo incipiente. Persisten sesgos que limitan el acceso equitativo a los beneficios de conciliación, y muchas políticas se aplican de manera discrecional. La falta de monitoreo y evaluación de estas medidas es otra barrera para su consolidación.

Es fundamental institucionalizar estas políticas y fomentar una cultura organizacional que promueva la corresponsabilidad del cuidado”, concluyó el informe. Esto no solo beneficiaría a las trabajadoras, sino que también contribuiría al desarrollo económico y social del país.

El estudio de Pro Mujer y CECI Tea Weeb busca impulsar un cambio transformador en las empresas bolivianas, promoviendo la igualdad de género y reduciendo las brechas laborales. Con datos actualizados y propuestas concretas, se espera que el sector privado asuma un rol más activo en la construcción de un mercado laboral más justo e inclusivo.