Canadá suspende impuesto digital tras presión de EE.UU.
El primer ministro Mark Carney anunció la medida horas antes de su entrada en vigor. La decisión se produce tras amenazas comerciales de Donald Trump y negociaciones bilaterales. Empresas tecnológicas estadounidenses y canadienses celebran el acuerdo.
«No tiene sentido cobrar para luego devolver»
Carney justificó la suspensión del Impuesto a los Servicios Digitales (DST) como parte de un «proceso de negociación más amplio» con EE.UU. El gravamen, que debía aplicarse desde el 1 de julio, afectaba principalmente a gigantes como Google, Meta y Amazon. «Es algo que esperábamos dentro del acuerdo final», declaró el primer ministro en el Parlamento.
Presión cruzada
Trump había amenazado el viernes con «terminar» todas las negociaciones comerciales si Canadá aplicaba el impuesto. Horas después, la Casa Blanca calificó la retirada como una «rendición». Sin embargo, fuentes canadienses destacaron que EE.UU. también eliminó un «impuesto de represalia» contra empresas canadienses en su reforma fiscal.
Empresarios aliviados
La Cámara de Comercio de Canadá celebró la decisión, argumentando que el DST «habría dañado la economía en un momento crítico». Grupos empresariales estadounidenses, como la Asociación Nacional de Fabricantes, también presionaron para evitar medidas retaliatorias que «enfriaran las inversiones».
Un tablero comercial complejo
El DST canadiense se aprobó en 2024 para gravar a empresas tecnológicas extranjeras con ingresos superiores a 20 millones de dólares locales. Paralelamente, el G7 acordó eximir a EE.UU. de un impuesto global mínimo del 15%, aunque sin abordar los gravámenes digitales nacionales.
Ahora, a negociar
Ambos países retomarán las conversaciones comerciales con miras a un acuerdo integral antes del 21 de julio. El ministro de Finanzas canadiense afirmó que esta medida «refuerza la prosperidad compartida», mientras la Casa Blanca insiste en su estrategia de «firmeza» en comercio.