Policía serbia enfrenta a manifestantes antigubernamentales en Belgrado
Seis agentes heridos y decenas de detenidos en los choques del sábado. Las protestas exigen elecciones anticipadas y el fin del mandato del presidente Vučić tras 12 años en el poder. El movimiento nació tras el colapso de un techo que mató a 14 personas en diciembre.
«No se puede derrotar a Serbia con violencia»
El presidente Aleksandar Vučić defendió en Instagram la actuación policial, calificándola de «patriótica y seria». Mientras, los estudiantes organizadores acusaron al gobierno de «optar por la represión». El ministro del Interior, Ivica Dačić, confirmó 77 arrestos y 38 detenidos pendientes de cargos.
El detonante: una tragedia bajo sospecha
Las manifestaciones comenzaron en diciembre de 2024 tras el derrumbe del techo de la estación de trenes de Novi Sad, que causó 14 muertes. Los manifestantes vinculan el accidente a la corrupción, desatando el mayor movimiento de protesta en la historia reciente de Serbia.
Balance de la noche más tensa
Según Reuters, los disturbios escalaron cuando manifestantes se enfrentaron a simpatizantes de Vučić. La policía, con equipamiento antidisturbios, dispersó a los asistentes con fuerza en el centro de Belgrado. Según Bloomberg, hubo más de 70 heridos entre agentes y civiles.
Doce años bajo el mismo liderazgo
Vučić gobierna Serbia desde 2013, primero como primer ministro y luego como presidente. Las protestas actuales reflejan un descontento acumulado por la gestión de infraestructuras y transparencia, agravado tras la tragedia de Novi Sad.
La calma no parece cercana
El gobierno insiste en mantener el orden, mientras los organizadores prometen continuar las movilizaciones. La presión por elecciones anticipadas marca un punto de inflexión en la crisis política más prolongada del país desde la era post-Yugoslavia.