Empleados de VOA reciben y pierden avisos de despacho en 48 horas
La agencia estatal USAGM retiró temporalmente despidos anunciados la semana pasada. La medida afecta a periodistas en Washington y surge tras críticas por errores en los procesos. Es parte del desmantelamiento ordenado por el gobierno de Trump.
«Un vaivén que desestabiliza a más de 600 trabajadores»
El viernes 27 de junio, empleados de Voice of America (VOA) recibieron un correo anulando los avisos de despajo enviados el 20 de junio. «Este comunicado informa que la notificación de Reducción de Personal (RIF) queda rescindida», decía el mensaje de USAGM, la agencia matriz. Sin embargo, se aclaró que habrá un nuevo RIF «en el futuro cercano».
Errores y presiones legales
Paula Hickey, presidenta del sindicato AFGE Local 1812 de VOA, afirmó que la retractación se produjo tras denunciar «violaciones legales» en el proceso. Los avisos iniciales incluían errores como fechas de nacimiento incorrectas y cálculos equivocados de indemnizaciones. «Es resultado de nuestras acciones», destacó Hickey.
El rol de Kari Lake
La asesora de Trump, encargada del desmantelamiento de VOA, negó inicialmente los cambios. Tras ver pruebas, argumentó que la medida permite a los empleados «actualizar sus archivos personales» antes del despido definitivo. Patsy Widakuswara, exjefa de la oficina de VOA en la Casa Blanca, calificó el proceso de «incompetente».
Un mandato con consecuencias globales
En marzo de 2025, Trump ordenó el desmantelamiento de varias agencias de noticias estatales, incluida VOA. Críticos denuncian que debilitar estos medios favorece la propaganda en países sin prensa libre, como Irán o China. Empleados del servicio persa de VOA, por ejemplo, fueron recontratados temporalmente durante la guerra entre Israel e Irán, antes de recibir nuevos avisos de RIF.
Mientras tanto, incertidumbre
El calendario de despidos sigue sin definirse, aunque inicialmente se fijó para el 1 de septiembre. Los afectados enfrentan un limbo laboral mientras continúan las negociaciones sindicales y los litigios contra la administración Trump.