Analista denuncia crisis política y desgobierno en Bolivia

José Rafael Vilar critica cinco años de inestabilidad institucional en Bolivia, señalando la fragmentación política y el colapso económico y social.
Agencia de Noticias Fides - Bolivia
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Analista político critica la falta de gobierno y democracia en Bolivia

José Rafael Vilar denuncia cinco años de desgobierno y crisis institucional. El artículo señala la incapacidad de las autoridades para pilotar el país, acumulando problemas económicos y sociales. Publicado hoy en Santa Cruz, cuestiona a políticos de todos los bandos por su fragmentación.

«Un país al pairo, sin rumbo ni liderazgo»

Vilar coincide con analistas que sostienen que desde 2020 «no se ha gobernado realmente». Critica la gestión del MAS —hoy «Menos»— por su inacción ante la inflación, escasez de gas y litio, y el ahogo a la agroindustria cruceña. «Se acumularon reclamos, miseria e informalidad», afirma, mientras la justicia y los municipios caen en descrédito.

Economía y sociedad en picada

La clase media —emergente durante el boom o previa al MAS— se reduce por la crisis, mientras la corrupción y los servicios públicos colapsan. El autor enumera: «salud fatal, educación en retroceso, racismo y división social», atribuyéndolos al «des-Gobierno» y al electorado que lo permitió.

Elecciones 2025: división y paradojas

En campaña, la «izquierda» se fragmenta en tres opciones débiles: Copa, Del Castillo y Andrónico Rodríguez, este último desgastado por su alineación con el «exJefazo» (Evo Morales). Del otro lado, la oposición tampoco logra unidad, con figuras como Doria Medina, Quiroga o Reyes Villa navegando entre ideologías. «Nos faltan Estado, gobierno y democracia», sentencia.

Raíces de un naufragio

El texto remonta la crisis al «silletazo» de Betanzos (2020), que fracturó al MAS, y al referéndum de 2016. Describe un ciclo de liderazgos fallidos, desde Morales —acusado de mentiras y envidia— hasta los actuales candidatos, más interesados en «poder legislativo revoltijo» que en soluciones.

Sin timón a la vista

El análisis concluye que Bolivia enfrenta su peor vacío institucional en décadas, con políticos incapaces de construir consensos y ciudadanos pagando las consecuencias. La crítica apunta tanto a los gobernantes como a la sociedad que los eligió.