Suboficial del Ejército asesinó al comandante del Regimiento Manchego

Un suboficial fue enviado a prisión preventiva por 180 días tras nuevas pruebas que lo vinculan con el asesinato del teniente coronel Juan Javier Soliz Cáceres. La Fiscalía investiga posibles cómplices y motivos económicos.
El Deber

Suboficial del Ejército asesinó al comandante del Regimiento Manchego

El acusado fue enviado a prisión preventiva en Palmasola por 180 días. Nuevas pruebas lo vinculan directamente con el crimen ocurrido el 31 de mayo en Montero. La Fiscalía investiga posibles cómplices y motivos económicos tras el homicidio.

«Panfletos falsos y pólvora en sus manos: las pruebas decisivas»

El suboficial Vizmar G. I., de 36 años, fue identificado mediante cámaras de seguridad y intentó desviar la investigación distribuyendo panfletos que acusaban falsamente a terceros. «Los mensajes buscaban entorpecer las pesquisas», afirmó el fiscal Luis Alberto Lafuente. La prueba de absorción atómica reveló restos de pólvora en sus manos, contradiciendo su coartada.

De encubrimiento a asesinato

Inicialmente detenido por encubrimiento y almacenamiento ilegal de municiones, la Fiscalía amplió la acusación tras hallar vínculos directos con la muerte del teniente coronel Juan Javier Soliz Cáceres. Sus compañeros desmintieron su declaración sobre disparos en la comunidad Las Pavas, situándolo en el lugar del crimen durante el pago de la Renta Dignidad.

«Una ejecución interna por disputas económicas»

El abogado de la familia, Eduardo Mérida, señaló que el crimen fue una «ejecución interna» motivada por conflictos económicos dentro del regimiento. Durante la audiencia, familiares del fallecido confrontaron a la defensa del acusado, exigiendo justicia. El Ministerio Público no descarta la participación de otros uniformados en el ocultamiento de pruebas.

Un comandante respetado, un regimiento en shock

El teniente coronel Soliz Cáceres era una figura destacada en el Regimiento Manchego, y su muerte violenta ha dejado un vacío en la cúpula militar del norte cruceño. La familia insistirá en que el caso llegue a juicio oral y se aplique la pena máxima.

Justicia bajo presión

El traslado del acusado a Palmasola marca un avance en el caso, pero persisten interrogantes sobre la red de complicidades. La eficacia de la investigación determinará si se esclarecen los motivos y responsables plenos del homicidio.