S&P rebaja la calificación crediticia de Bolivia a ‘CCC-‘ por riesgo de impago
La agencia advierte de un deterioro acelerado de la liquidez externa. La decisión refleja la falta de dólares, el aumento de la deuda y la inestabilidad política. La perspectiva es negativa para los próximos 6 a 12 meses.
«Un golpe a la reputación financiera del país»
Standard & Poor’s (S&P) rebajó este miércoles la calificación soberana de Bolivia de ‘CCC+’ a ‘CCC-’. El informe señala «serias dudas» sobre la capacidad del país para cumplir con sus pagos, debido al aumento del servicio de la deuda y las restricciones para acceder a financiamiento externo. «Esto plantea riesgos concretos para la estabilidad económica y monetaria», destaca el documento.
Factores críticos
La decisión considera: – La brecha entre el tipo de cambio oficial y el paralelo. – La escasez de dólares y el aumento de la inflación. – Disputas políticas que limitan la capacidad del gobierno para abordar desequilibrios macroeconómicos.
Reservas en caída y presiones inflacionarias
Bolivia ha experimentado una caída sostenida en sus reservas internacionales netas desde 2023. El país recurre al financiamiento interno del Banco Central para cubrir gastos, lo que incrementa las presiones inflacionarias. Además, las restricciones a las exportaciones y el estancamiento de la inversión privada agravan el escenario.
Un camino cuesta arriba
En 2023, Bolivia registró su mayor índice de riesgo país (2.190 puntos), con expectativas negativas en el ámbito político y electoral. La rebaja encarece el acceso a créditos externos, justo cuando el país necesita financiamiento. Economistas advierten que, sin cambios estructurales, la crisis podría profundizarse.
Sin margen para errores
La calificación ‘CCC-’ sitúa a Bolivia al borde del aislamiento financiero. La perspectiva negativa de S&P anticipa meses críticos, donde la capacidad de pago y la confianza de los mercados serán clave para evitar un colapso mayor.