SIP alerta sobre aumento de violencia contra periodistas en Bolivia
La organización denuncia agresiones físicas, hostigamiento judicial y restricciones económicas. El informe señala un clima de tensión electoral y crisis económica como contexto. Medios y gremios periodísticos exigen garantías para ejercer la profesión.
«Cuatro frentes de asfixia a la prensa libre»
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) identificó exclusión de publicidad estatal, persecución tributaria, discursos estigmatizantes y violencia física como las principales amenazas. «El discurso ideológico transforma la crítica en ataques», señala el informe, que cita consignas como «prensa vendida» o «cárteles de la mentira».
Agresiones en un contexto electoral
La Asociación Nacional de Periodistas de Bolivia (ANPB) vinculó la escalada de violencia con la tensión por la posible candidatura de Evo Morales. Seguidores del expresidente han agredido a periodistas en carreteras y redes sociales, e incluso amenazado con incendiar sedes de medios.
El Estado en el banquillo
La SIP exigió al gobierno investigar los ataques y frenar la retórica contra medios independientes. Martha Ramos, de la SIP, subrayó: «El Estado debe promover un entorno seguro y desalentar discursos estigmatizantes». La Fiscalía también ha sido señalada por acusar a medios como Unitel de «conspiración».
Un índice que preocupa
El Índice Chapultepec 2024 clasifica a Bolivia con «alta restricción» a la libertad de prensa, destacando impunidad en agresiones, cierre de medios y asfixia económica. La SIP advierte que esto vulnera el derecho ciudadano a información veraz.
Voces que se apagan
El cierre concluye que la combinación de violencia física, acoso judicial y presión económica debilita el periodismo independiente. Sin juicios de valor, el texto refleja la preocupación internacional por el deterioro democrático que esto implica.