La escasez de combustible en Santa Cruz agrava el transporte público
En Santa Cruz de la Sierra, ciudad económica de Bolivia, la falta de combustible ha reducido drásticamente la disponibilidad de transporte público, afectando a miles de ciudadanos que dependen de micros para sus desplazamientos diarios. Este problema se viene intensificando desde antes del Carnaval y ha generado largas filas en los surtidores, mientras que los usuarios se encuentran a la espera por largos períodos en las paradas.
Impacto en el día a día de los ciudadanos
La escasez de micros en Santa Cruz está generando tiempos de espera insostenibles para los ciudadanos. “No hay mucho transporte, la gente busca cómo llegar al trabajo. Esperamos unos 20 a 25 minutos”, comenta un joven en el cuarto anillo de la avenida San Aurelio, mientras una mujer en la misma zona relata que llega a esperar hasta 40 minutos para trasladarse al Plan Tres Mil. Esta situación se vislumbra en diferentes puntos de la ciudad, afectando a residentes de todas las áreas.
Agudización desde antes del Carnaval
La escasez de combustible no es un fenómeno nuevo, sino que se ha ido agudizando desde antes del Carnaval. La falta de diésel y gasolina ha repercutido no solo en el transporte público, sino también en el acceso diario a las estaciones de servicio, donde las filas son interminables tanto para vehículos públicos como privados, complicando más la situación de movilidad urbana.
Panorama en otras regiones
Este problema no se limita a Santa Cruz, pues también se replica en otras áreas. En El Alto, los choferes han optado por iniciar un paro indefinido desde el miércoles debido a la misma problemática. El desabastecimiento de combustible está provocando manifestaciones y bloqueos, impactando al transporte nacional de manera significativa.
Antecedentes del suministro de combustible en Bolivia
Históricamente, Bolivia ha enfrentado desafíos en la distribución regular de combustible. Estos episodios suelen estar ligados a problemas en la cadena de suministro, logística y, en ocasiones, a políticas de importación y distribución internas. Santa Cruz, al ser un núcleo económico, experimenta las consecuencias de estas deficiencias de manera acentuada.
La información ha sido recopilada a partir de testimonios directos en diferentes zonas de Santa Cruz, como el cuarto anillo de la avenida San Aurelio y el Plan Tres Mil. Además, se ha constatado el contexto a través de reportes de la prensa local y medios como Unitel Digital.
La situación en Santa Cruz evidencia la vulnerabilidad del sistema de transporte ante la falta de recursos básicos como el combustible. Las largas esperas no solo afectan la rutina diaria, sino que inciden en la productividad de los ciudadanos. Es necesario que las autoridades aborden este problema con urgencia para evitar que la crisis de movilidad se profundice aún más.