EEUU despliega bombarderos B-2 hacia el Pacífico ante tensión entre Irán e Israel
Los aviones pueden transportar bombas «bunker buster» de 13.600 kg. El Pentágono mantiene rotaciones de estos bombarderos desde primavera, aunque el movimiento no implica un ataque inminente. La decisión se produce mientras Trump evalúa atacar instalaciones nucleares iraníes y aumenta la escalada bélica en Oriente Medio.
«Los B-2 son clave para alcanzar blancos subterráneos»
Varios bombarderos B-2 despegaron este sábado desde bases en EEUU rumbo al Pacífico, acompañados por aviones nodriza. Son los únicos capaces de portar las bombas masivas diseñadas para destruir instalaciones como la planta nuclear de Fordow, objetivo que Israel no puede alcanzar solo. «No es señal de un ataque inmediato», aclaran fuentes militares, pero refuerzan la presión sobre Irán.
División en el partido de Trump
Dos bandos enfrentados dentro del Partido Republicano debaten la intervención directa: los halcones piden acción militar, mientras los aislacionistas advierten contra una guerra amplia. Trump, que el jueves dio un plazo de dos semanas para decidir, parece inclinarse por la facción intervencionista. Negociaciones con Irán están paralizadas por su negativa a abandonar el enriquecimiento de uranio.
Preparativos militares acelerados
EEUU ha desplegado dos portaaviones, destructores y escuadrones de cazas F-16, F-22 y F-35 en la región. Las rotaciones de B-2 comenzaron durante los bombardeos a blancos hutíes en Yemen este año. Mientras, Israel atacó este sábado una instalación nuclear iraní y eliminó a tres altos mandos militares, en una campaña que sus fuerzas califican de «prolongada».
Un conflicto que no deja escalar
La tensión estalló la semana pasada con un ataque «preventivo» israelí a instalaciones nucleares iraníes, seguido de represalias. Varios países, incluido EEUU, han evacuado personal diplomático y ciudadanos de Israel. El ministro iraní de Exteriores advirtió hoy que una intervención estadounidense directa sería «muy peligrosa».
El reloj sigue corriendo
La decisión de Trump en las próximas dos semanas podría definir el alcance del conflicto. Mientras, el despliegue militar estadounidense e israelí aumenta la capacidad de ataque, pero también el riesgo de una escalada regional sin retorno.