TSE solicita $us 4 millones para el voto en el exterior y Doria Medina destaca avances electorales
El Tribunal Supremo Electoral (TSE) requiere financiación para garantizar el voto de bolivianos en el extranjero. Mientras, el candidato Samuel Doria Medina resalta la aprobación de créditos internacionales y el diseño de la papeleta como señales de avance hacia las elecciones del 17 de agosto.
«El país eligió salir de la crisis por la vía pacífica»
Samuel Doria Medina, candidato presidencial de la alianza Unidad, afirmó que la aprobación del diseño de la papeleta electoral y los créditos internacionales son pasos clave para superar la crisis. «Abandonaremos la violencia y bloqueos mediante el voto», declaró en entrevista con UNITEL.
Avances en el proceso electoral
El TSE aprobó este miércoles el diseño de la papeleta tras un sorteo oficial entre candidaturas. Doria Medina lo calificó como un «avance concreto» hacia los comicios del 17 de agosto, fecha que considera crucial para resolver la crisis económica y social.
Créditos internacionales aprobados
El Congreso boliviano dio luz verde a tres financiamientos externos: $us 50 millones de FONPLATA, $us 110 millones de la CAF y $us 250 millones del BID. Estos recursos se destinarán a emergencias por desastres naturales y salud pública, según detalló el candidato.
Un empresario frente a la política
Doria Medina, quien participará en el foro agropecuario de Santa Cruz el 25 de junio, se definió como «un empresario que toma decisiones, no un político que posterga soluciones». Prometió presentar su plan económico para los primeros 100 días de gobierno.
Elecciones como salida a la crisis
Bolivia enfrenta tensiones sociales y económicas, con protestas y bloqueos recientes. Las elecciones del 17 de agosto son vistas como la vía institucional para reducir la conflictividad, según el discurso del candidato y los avances en la organización electoral.
El camino hacia agosto
La concreción de los preparativos electorales y la inyección de recursos externos marcan los próximos pasos. La ciudadanía espera que el proceso sea transparente y pacífico, en un contexto donde la polarización política sigue latente.