Congresistas estadounidenses debaten aumentar seguridad ante amenazas
La Policía del Capitolio solicita un 22% más de presupuesto para 2026. Legisladores evalúan reforzar protección tras tiroteos en Minnesota y crecientes amenazas. Reuniones bipartidistas analizan medidas sin restringir su accesibilidad.
«La realidad que vivimos»: seguridad versus libertad
Tras los tiroteos en Minnesota que mataron a una legisladora estatal e hirieron a un senador, congresistas enfrentan el dilema de aumentar medidas de protección. «No quiero tener seguridad. Soy una persona privada», declaró el senador republicano Markwayne Mullin, pese a reconocer amenazas constantes.
Propuestas en marcha
Un programa bipartidista liderado por Schiff (D) y McCormick (R) impulsa más fondos para seguridad en distritos. La Policía del Capitolio ya tiene acuerdos con 100 departamentos locales, pero exsenadores como Thomas Manger admiten que «siempre se quita a Pedro para pagar a Pablo» al asignar recursos.
Resistencia y demandas
Mientras algunos legisladores rechazan escoltas para mantener contacto ciudadano, otros como Blumenthal (D) piden más inteligencia para distinguir amenazas reales de «bromas». La Cámara Baja evalúa ampliar gastos en seguridad las 24 horas, actualmente limitados a «deberes oficiales».
De los disturbios del 6E a un presupuesto récord
El ataque al Capitolio en 2021 disparó un 70% el presupuesto policial, que ahora busca alcanzar los $967,8 millones. En 2024 se registraron 9.400 amenazas, muchas con detalles temporales para legisladores sin protección habitual.
Vivir bajo amenaza: ¿nueva normalidad?
Pese a las divisiones, congresistas como Mullin admiten adaptarse: «Tengo vidrio antibalas en mi casa y perros de seguridad». La Policía del Capitolio asegura coordinar con agencias locales, pero evita detalles «por seguridad». La votación presupuestaria de la próxima semana definirá el alcance de las medidas.