Crisis económica agrava maltrato a adultos mayores en Bolivia

Anambo denuncia que el 81% de los adultos mayores depende de la Renta Dignidad, pero la inflación y escasez de combustibles han reducido su capacidad adquisitiva, exponiéndolos a abandono y violencia.
Agencia de Noticias Fides - Bolivia

Anambo denuncia que la crisis económica agrava el maltrato a adultos mayores

El 81% de los adultos mayores depende exclusivamente de la Renta Dignidad, según la organización. La inflación y la escasez de combustibles han reducido su capacidad adquisitiva, exponiéndolos a abandono y violencia. El pronunciamiento se dio en el Día Mundial de toma de conciencia del Abuso en la Vejez.

«La crisis es otra forma de maltrato estructural»

Anambo alertó que la combinación de inflación, informalidad laboral y cambio climático está profundizando la vulnerabilidad de los adultos mayores. «No solo enfrentamos violencia física, sino indiferencia del Estado y desposesión de tierras», señaló la organización. En zonas rurales, sequías han afectado sus actividades agrícolas, agravando su situación económica.

Repercusiones en la vida cotidiana

La Renta Dignidad, que antes era un apoyo, «hoy no alcanza para nada», según Anambo. Muchos adultos mayores se ven obligados a trabajar en la informalidad, enfrentando explotación y discriminación. Félix Larrazábal, dirigente de la organización, calificó esta situación como «un abuso hacia un sector vulnerable».

Un problema que no solo ocurre el 15 de junio

Anambo exigió a las autoridades políticas públicas efectivas, incluyendo atención preferencial en salud y protección legal contra la violencia patrimonial. «El respeto debe ser un principio cotidiano, no solo simbólico», remarcaron. La organización también pidió participación activa en el diseño de medidas que los afecten.

De la conmemoración a la desprotección

Desde 2006, el 15 de junio se conmemora el Día Mundial de toma de conciencia del Abuso en la Vejez, establecido por la ONU. Sin embargo, Anambo destacó que en Bolivia la situación sigue siendo alarmante, con maltratos recurrentes en familias, instituciones y comunidades.

Un llamado a la acción permanente

La organización instó a erradicar el maltrato mediante estrategias coordinadas entre gobiernos locales y nacionales. La crisis económica ha convertido sus demandas en urgentes, especialmente para quienes dependen de ingresos insuficientes y actividades afectadas por factores externos.