Mercenarios vinculados al narcotráfico atacan en Llallagua y Chapare
Cuatro policías y un civil murieron en emboscadas armadas. El ministro Siles vinculó los ataques a grupos criminales organizados. Los hechos ocurrieron esta semana en el norte de Potosí y Cochabamba.
«No son protestas, son estructuras delictivas armadas»
El ministro de Justicia, César Siles, confirmó que los ataques en Llallagua (Potosí) y el Chapare (Cochabamba) fueron ejecutados por «mercenarios y francotiradores» vinculados al narcotráfico, contrabando y tráfico de vehículos ilegales (autos chutos). «Pretenden evitar con violencia el ingreso de fuerzas del Estado a estas zonas», explicó.
La masacre de Llallagua
El miércoles 11 de junio, una emboscada con armas de fuego contra un contingente policial dejó cuatro agentes y un civil muertos, además de decenas de heridos. Las Fuerzas Armadas intervinieron 24 horas después. Los ataques ocurrieron a metros de la zona urbana, según reportes oficiales.
De la protesta al crimen organizado
Siles destacó que estos grupos «han dejado de ser actores sociales» para convertirse en organizaciones criminales con respaldo económico y capacidad armada. Las zonas afectadas son focos históricos de narcotráfico y contrabando, según el ministro.
Un luto que se extiende
Los ataques en Llallagua y el Chapare evidencian la creciente militarización de redes delictivas. El gobierno inició investigaciones, mientras la población enfrenta bloqueos y violencia. La intervención tardía de las Fuerzas Armadas genera cuestionamientos.
