El Supremo confirma la condena por corrupción que inhabilita a Cristina Fernández
La expresidenta argentina queda fuera de las elecciones legislativas de septiembre. El Tribunal Supremo ratificó por unanimidad la sentencia de seis años de prisión e inhabilitación perpetua en la ‘causa Vialidad’. Fernández denuncia «persecución política» y acusa a los jueces de ser «monigotes».
«Un cepo al voto popular»: la reacción de la líder opositora
Tras conocerse el fallo, Cristina Fernández se dirigió a sus seguidores desde la sede del Partido Justicialista (PJ) y afirmó que «la sentencia ya estaba escrita». Acusó a la Justicia de imponer un «cepo al voto popular» y tildó a los magistrados de «monigotes al servicio del poder económico». «Estar presa es un certificado de dignidad», declaró, llamando a la militancia a resistir.
Detalles de la sentencia
Los jueces Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti avalaron la condena por corrupción en la adjudicación de obras viales a un socio durante sus mandatos (2007-2015). El tribunal sostuvo que «el proceso fue garantista y la decisión se basó en pruebas y derecho vigente», según el diario ‘La Nación’. Fernández, de 72 años, podría cumplir arresto domiciliario.
Milei celebra: «La república funciona»
El presidente Javier Milei, en gira por Israel, celebró el fallo en redes sociales: «Se logró justicia». Afirmó que «los medios cómplices de la impunidad quedaron expuestos», en alusión a las críticas de Fernández sobre un supuesto «pacto político-judicial». El Gobierno considera el caso un hito contra la corrupción.
Una condena con raíces en la década kirchnerista
La ‘causa Vialidad’ investiga desde 2016 presuntas irregularidades en contratos públicos durante los gobiernos de Fernández. La expresidenta, figura central del PJ y principal opositora a Milei, insiste en que es víctima de «lawfare» (uso político de la Justicia). El fallo llega tres meses antes de las elecciones legislativas clave.
Un cierre judicial, pero no político
La sentencia cierra la vía judicial para Fernández, pero intensifica la polarización en Argentina. La inhabilitación redefine el escenario opositor, mientras el oficialismo refuerza su discurso anticorrupción. El impacto en las urnas se verá en septiembre.