Trump acusa a la «izquierda radical» de financiar protestas en Los Ángeles
El presidente estadounidense vinculó las manifestaciones con grupos políticos opositores. Los disturbios surgieron tras redadas migratorias federales en California. Choques entre manifestantes y autoridades dejaron decenas de detenidos y heridos.
«No toleraremos protestas con mascarillas»
Donald Trump afirmó en Truth Social que las protestas son «instigadas por alborotadores pagados». Anunció la prohibición de mascarillas en manifestaciones y elogió a la Guardia Nacional. Criticó duramente al gobernador Gavin Newsom y a la alcaldesa Karen Bass, a quienes responsabilizó por la gestión de la crisis.
Respuesta de las autoridades locales
La alcaldesa Bass cuestionó el envío de 2.000 efectivos de la Guardia Nacional, afirmando que las fuerzas locales podían controlar la situación. El secretario de Defensa Pete Hegseth amenazó con desplegar infantes de Marina si continuaba la violencia, lo que Newsom calificó de «comportamiento desquiciado».
Redadas y represión en Paramount
El sábado, 50 vehículos federales realizaron un operativo migratorio en una empresa de Paramount. Manifestantes intentaron impedir detenciones, pero agentes repelieron con gases lacrimógenos y granadas aturdidoras. Hubo heridos por balas de goma y tácticas militares para evacuar detenidos. El Departamento de Seguridad Interna denunció vandalismo contra edificios federales.
California en el ojo del huracán
Los Ángeles enfrenta su tercer día de disturbios tras las redadas masivas en siete ubicaciones. El estado, gobernado por demócratas, ha sido escenario recurrente de tensiones entre activistas y políticas migratorias federales durante la administración Trump.
Un polvorín político sin apagar
La escalada refleja la polarización en EE.UU. ante acciones migratorias y protestas. Las acusaciones cruzadas entre el gobierno federal y autoridades locales profundizan la crisis, mientras continúan los operativos y la represión.